Capitulo 7: somos una familia

351 25 0
                                    

Luego de una charla rápida entre ellos dos sobre lo que había sucedido en estos meses, de todo lo que se había perdido, de todo lo que sucedió en esos meses que ella estuvo ausente y de cómo defendieron el campamento.

-¿¿Y como te lo tomaste cuando te dijeron lo de Marcus?? -pregunto con cautela Sam ya sabiendo lo que ella sentía por él.

Sabia Sam que ella debía estar sufriendo por el, ya se le notaba a Nerea que quería mandar todo al Tártaro e ir a buscar a Marcus, pero sabía que ella no se dejaría llevar por sus emociones.

-La verdad......no lo sé, solo siento que quiero dejar todo de lado e ir a buscar a Marcus, pero no lo quiero hacer...quiero buscar a mis hermanos -dijo ella conteniendo los sollozos.

-Hey Nery....se que puede ser difícil y también doloroso, pero lo importante ahora es que todos estamos a salvo y así poder levantarnos con la ayuda del otro -dijo Sam intentando animarla.

Lo cual le resultó al sátiro, la ánimo que se le había olvidado ese sentimiento de solo querer ir tras Marcus y sus hermanos.

-Tienes razón Sam -dijo Nerea para luego dirigirse hacia donde estaban los mestizos-hay que levantarnos y mostrar que nada, ni nadie puede con nosotros.

Cuando por fin llegó donde estaban todos lo semidioses, inicio a oír ideas para las nuevas cabañas, mientras que ella les decía lo que podría ser más práctico y resistente, Quirón les decía a los demás como estar preparados por si volvían, que tácticas podrían utilizar para ver si funcionaban, mientras que el señor D.....pues solo estaba viendo su revista de vinos y tomando Coca-cola light.....sip todo normal para ella.

Excepto por el hecho de que había nuevas criaturas que nunca habían visto, pero aparte de eso, nada era nuevo para Nerea, volvio a ver a sus amigos (más bien chicos que querían algo con ella), también ayudó a reconstruir las cabañas.

Y aunque no era tiempo, los sátiros trajeron a nuevos campistas (mínimo eran como quince, máximo eran como veinticinco), lo cual casi no era nuevo, o eso pensaban hasta que en una campista fue reconocida con un símbolo desconocido.

-Salve Luna Smith-dijo Quirón-hija de Nix, diosa primordial de la noche.

Todos se quedaron en silencio, no sabían que hacer, nunca creyeron que esto hiba a suceder, ¿una semidiosa de una diosa primordial?, Si al parecer era posible.

Luna (que era una chica pelirroja y con unos ojos azul oscuro que parecía la misma noche) estaba mirando preocupada a todos, creyendo que hizo mal en ir al campamento, hasta que Nerea tomó la iniciativa y se dirigió hacía ella, mientras que luna temiendo por lo que ella hiciera.

Aunque los campistas estaban ahí, solo se quedaron en su lugar, mientras siguieron a su líder con la mirada, impacientes por saber que iba a hacer ella.

Cuando por fin se acercó lo suficiente a la hija de Nix, Nerea la vio como analizandola, mientras Luna creía que se iba a desmayar, también creía que ella iba a ser exiliada.

Pero sucedió lo más inesperado para Luna, fue que Nerea se agachara a su altura y la abrazara, aunque daba a atender a los demás campistas que era bienvenida aquí.

-Bienvenida Luna-dijo Nerea con una sonrisa-. Espero que te sientas como en casa.

-G...Gracias -dijo tímidamente.

Nerea solo le sonrió para luego todos los campistas le dieran la bienvenida al campamento, mientras Nerea le decía más o menos como sería la cabaña de ella, pero faltaba la opinión de Luna.

-Hey luna -grito Nerea ganándose miradas de los campistas de curiosidad-. Ven necesitamos ver cómo hacer tu cabaña a tu gusto y a la vez de la diosa.

Luego de eso Luna se fue donde estaba Nerea y a una mujer adulta, que creía que era una ex-campista de el campamento.

-Luna, te presento a Annabeth Chase arquitecta del Olimpo, ex-campista y mi madre -dijo Nerea.

-Es un gusto pequeña -dijo Annabeth Chase dándole una sonrisa.

Estaban esperando a que dijera algo la hija de Nix pero ella solo asintió por lo que pero siguio hablando-. Ahora veamos, que quieres para tu cabaña.

-La verdad -dijo por primera vez después de que la reclamaron-. No lo sé, ustedes eligan.

Luna ella nunca fue de las chicas con las que podían elegir por su cuenta, ella era de las chicas que se quedaban calladas, pero Nerea no lo iba a permitir, Nerea la haría sentir como en un hogar.

-A ver Luna, te diré una cosa-dijo Nerea-si estás aquí es para adaptar la cabaña a tu estiló y al de tu madre, queremos que te sientas cómoda en tu cabaña y en el campamento.

-Pero....yo no...se -dijo ella intentando hayar las palabras.

-Hey -dijo Nerea-. Se que enterarte de ser una semidiosa puede asustar y también no sea tan fácil -dijo hacien una pausa-. Y tal vez tu familia divina a veces te desprecie o te quiera, pero lo importante es que hay más semidioses que están o estuvieron en tu situación... descuida, con el tiempo todo puede mejorar, harás amigos y conocerás a buena gente, aparte aquí es como una familia, si alguien se mete con uno, sales todo el campamento ha defenderlo.

-¿¿Eso crees?? -pregunto la pequeña pelirroja.

-No lo creo, estoy segura de eso -dijo Nerea-. Por que este no es solo un campamento, es una familia, nos apoyamos los unos a los otros, de eso no tengas dudas -dijo ella para luego abrazar a la pequeña.

Luego de eso se pusieron a manos a las obras para iniciar los planos de todas las cabañas y a ver si tenían todo el material que ocupaban para hacer la remodelación de todo el campamento.

꧁______________________________꧂

Después de revisar todo lo que necesitaban ya estaban levantando las cabañas (que ahora eran veinticinco cabañas), también estaban pensando en que si vendría bien ponerle un lugar más cómodo al oráculo en vez de que estuviera en una cueva.

Aunque tendrían que consultar a el dios Apolo si estaba bien hacer eso, pero ya sabían cual era el costo que el pondría para hacer eso, una cita con Nerea, desde hace tiempo el dios se fijó en ella (igual que otros dos dioses), ellos sabrían que Nerea jamás aceptaría una cita con el dios, a menos de que fuera por algo importante y esto lo era para ellos.

𝕃𝕒 𝕄𝕒𝕣𝕖𝕒 𝕀𝕟𝕔𝕠𝕟𝕥𝕣𝕠𝕝𝕒𝕓𝕝𝕖 𝕐 𝕃𝕠𝕤 ℂ𝕚𝕟𝕔𝕠 𝕄𝕦𝕟𝕕𝕠𝕤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora