1- Andromeda.

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"Comienza a escribir tu historia, no lo que las personas quieren que escribas."

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Me llamo Andrómeda Miller... ¿Bonito nombre, no? Vengo de unos padres un tanto peculiares, pero tratan de darme a mí y a mi hermano lo mejor... Y sí, tengo un hermano mayor llamado Gadiel, el nombre (Gadiel) es por el cuarto Arcángel en la Biblia, mis padres son algo sensibles en ese tema, tienen la mente abierta a todo, hasta la mitología griega. Por ejemplo, el mío es el nombre de la hija más hermosa del rey y la reina de la antigua Etiopía y esposa de Perseo (hijo de Zeus).

Mi nombre llamaba mucho la atención de pequeña, pero me fui acostumbrando y ahora más que nunca me enorgullezco de este.

Mi vida ha sido una locura completa, mi obsesión se había convertido en amor por el mejor amigo de mi hermano y acabé destrozada, con el corazón en mil pedazos. Y para terminar, estoy a 376.4 kilómetros lejos de mi hogar, en una universidad donde duré 4 años de un infierno total, no hacía otra cosa que estudiar.

Para que entiendan mejor, debemos viajar hace 6 años atrás, cuando solo era una chica de preparatoria y estaba obsesionada con Jacob Hoffman.

**6 años Antes**

- Si no te levantas ahora mismo, dejaré que camines a la escuela. - dice mi hermano entrando hecho furia a mi habitación.

Mi hermano, un chico alto, guapo, ojos cafés, atlético y está en el equipo de baloncesto, viene siendo uno de los chicos más deseados y populares de la preparatoria, en cambio yo pues...

Rubia, ojos marrones claros, mido 5'5 (Sí, no soy muy alta que digamos). No soy ni tan flaca ni tan pasada de peso, diría que tengo buena forma, 16 años, virgen, nadie me soporta, y soy un cero a la izquierda en mi escuela, solo soy reconocida por ser la hermana de Gadiel.

"Se escucha de película, pero no es nada divertido, créanme."

Hoy era el primer día de clases, estoy en el penúltimo grado, solo me falta este y otro año más para por fin graduarme e irme a una universidad estable, a comparación de mi hermano, está en su último año.

"¡Qué suerte tienen algunos!"

- ¡Te estoy hablando, Andrómeda!

Cuando mi hermano me llama por mi nombre es porque ya está enojado, y no solo va para él, toda mi familia es así, usualmente me dicen "Andi".

Siento las enormes manos frías de mi hermano tirar de mi tobillo, hago una mueca de disgusto, pero a este le vale madres, y me da la tirada del año. Siento el piso estampado en mi cara.

- ¡Mierda! - digo en un grito y este ríe, pero su enojo aún se ve. Solo traía una camiseta no tan larga y mis panties, para nosotros no es cosa del otro mundo vernos en ropa interior.

- Date prisa, te veo abajo en 5. - Dice por último saliendo y dejándome tirada.

Era un imbécil. Me levanto a paso de tortuga y me dirijo al baño.

Después de durar una hora, y cantar todas las canciones de Adele, salgo y me pongo el uniforme. Una vez lista, bajo las escaleras tan tranquilamente, y siento los ojos de mi hermano el cual radiaba un enojo único. Pero me pongo nerviosa cuando siento otros ojos más observándome mientras bajaba.

Jacob Hoffman... El amor de mi vida, futuro padre de mis hijos y mejor amigo de mi hermano.

Cabello rubio, unos ojos enormes marrones claros, un porte inexplicable, una piel de porcelana, 18 años, unos labios deseables, un trasero único, ¡mide 6,1 y mierda es mi puta debilidad!

Hace mucho no lo veía, ya que se fue de viajes con su familia adinerada todo el verano. Jacob juega baloncesto junto a mi hermano y se podría decir que es más imbécil que mi hermano y más amado en mi escuela. Los dos se han acostado **Corrección de Gramática y Ortografía:**

Andromeda ⒸDonde viven las historias. Descúbrelo ahora