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Hola clowns, me gustaría que comentaran, compartieran y votaran.
Me ayudaría mucho y me motivaría a seguir subiendo nuevo capítulo más seguido<3

Y nada, espero disfruten el capitulo.

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HURRICANE OF EMOTIONS.

Sky se encontraba de camino a su habitación. Moon y él estaban en la misma, por suerte.

El castaño se acordó de lo que pasó esta tarde y su preocupación salió a flote de nuevo. Pensó que debería aprovechar esa oportunidad también para contarle sobre la desconocida chica que conoció en el baño. Sky se rio al recordar todo por lo que pasó para ayudarla:

Se encontraba corriendo hacia la enfermería, pero antes de pasar por su clase decidió ir agachado para que la profesora no lo descubriera. Una vez que pasó por su clase empezó a correr de vuelta sin pensarlo.
Al llegar, asomó su cabeza por la pequeña ventanilla de la puerta y al ver que Jennie se encontraba dentro, sonrió y con prisa entró.

—¡Hola Jennie! —saludó sobresaltando a la enfermera.

—Hola... ¿No tendrías que estar en clase? —le preguntó a la vez que entrecerraba sus ojos como si estuviera sospechando de él.

—Es que fui al baño y al salir surgió un problema.

—¿Qué pasa?

Mientras que Jennie esperaba que Sky le contara, Sky no encontraba las palabras para describirle la situación, y más porque se le había olvidado como era que se llamaba lo que precisamente necesitaba la chica.

—Acaso... ¿Tienes diarrea?

Sky negó con la cabeza.

—Tienes... ¿Indigestión?

—No, no es para mí. Es para una chica —respondió con algo de exasperación por no recordar el nombre.

—Ah... me hubieras dicho desde el principio que no era para ti —Jennie suspiró— Entonces... ¿Cómo es lo que necesitas?

—Tiene forma de... —El de piel pálida hizo como si fuera a deslizar algo, demostrándolo con la palma de su mano moviéndola hacia delante a la vez que buscaba la palabra correcta— Ay no sé.

—¿No tienes hermanas o amigas? —la enfermera se cruzó de brazos y Sky negó algo apenado.

—No, todos son chicos —mintió—. Y a la chica no la conozco.

La enfermera apoyó su mandíbula en la palma de su mano a la vez que su codo apoyaba su escritorio, y todo sin apartar sus ojos de Sky.

—¿Para que se usa precisamente? —preguntó.

Sky miró hacia el techo pensativo.
¿Para que exactamente sirven?
Sabía que era algo que le venía exactamente cada mes a la mayoría de las chicas, incluso tenía la palabra en la punta de la lengua.

—¡Sangre! —respondió lo primero que se le vino a la mente—. Ayuda a detener el sangrado... creo.

—¿Una curita?

—¡No! Bueno sí, pero no. Es como una curita, pero grande. Es como... —chasqueó los dedos— ¡Pañales!

De repente, un largo silencio se formó. Sky se encontraba con lo que era una sonrisa incómoda en su rostro, mientras que la enfermera con el ceño fruncido.

HURRICANE [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora