17.- Tal vez yo, tal vez tú

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Existen dos tipos de tiempo: el tiempo que nos indica el reloj y el tiempo emocional o subjetivo, que se crea a partir de la percepción que tengamos de este, donde un minuto puede transformarse en horas, o un mes transcurrir en sólo un par de segundos. En las relaciones el tiempo no importa, ya que nuestros sentimientos no se basan en la lógica o en la razón, sino en los afectos.

La extrañaba, a pesar de que se habían visto hace dos días, tenía la sensación de que había pasado una semana. Este era un sentimiento nuevo para él, se había acostumbrado de tal manera a la soledad, que sentir esta dependencia lo inquietaba, pero a la vez lo hacía feliz. Después de ser testigo del intento de suicidio de su abuelo a tan corta edad, inconscientemente había desarrollado un mecanismo de defensa que lo llevaba a evitar los afectos manteniendo siempre distancia hacia los demás, ya que era la mejor forma de protegerse ante el dolor de la separación. Pero con Nina no podía ser indiferente, ella le despertaba todas y cada una de sus emociones.

Desde pequeño mostró una personalidad autosuficiente, fruto sin duda de su historia familiar y de la estricta educación que recibió. Siempre escondió su mundo interior, a pesar de que estaba lleno de sentimientos y su corazón era hermoso, pero para quien no lo conocía realmente, era difícil descubrirlo.

Ahora mismo pensaba en ella, en la chica que había abierto la puerta de ese corazón por primera vez. No era el momento, tampoco era el lugar, pero aun así, no podía evitar que ella se apoderara de sus pensamientos. Escuchaba a Robert y al abogado conversar preocupados sobre lo más conveniente para la banda, veía al líder de Stone Shoes frente a él con una expresión visiblemente avergonzada, mirando con expectación a su joven abogado, que a diferencia de él, lucía muy seguro y tranquilo junto al mánager.

Sentados en una gran mesa se encontraban los representantes de cada una de las bandas involucradas, luego de la notificación de la demanda, PINKSIDE entregó todas las pruebas que confirmaban y daban cuenta de la autoría de su canción. Con una personalidad tan obsesiva como la de Alex, estas bastaban y sobraban para terminar con toda duda que pudiese tener cualquier juez. Cuando el abogado de Stone Shoes las revisó en el juicio, su expresión confiada cambió repentinamente y solicitó a la otra parte, para sorpresa de todos, conversar en privado.

—Pienso que es un buen trato, para ustedes y para nosotros —dijo el abogado de Stone Shoes al tiempo que presentaba un documento en triplicado para los representantes de PINKSIDE—. Mis clientes están dispuestos a quitar la demanda y entregar disculpas publicas por el error, siempre y cuando, PINKSIDE se comprometa a no contrademandar. Si somos justos, el responsable de toda esta confusión fue su antiguo productor, Stone Shoes no tenía forma de saber que esa pista correspondía a una de sus canciones.

—Pero bien que se han aprovechado de la publicidad —reclamó Robert molesto.

—Eso es otro tema, por lo demás la publicidad ha sido obra de los medios, Stone Shoes no es responsable legal de lo que los periodistas digan o concluyan.

—Mis representados han debido alterar su agenda y perdido mucho tiempo a raíz de esta demanda —acotó el abogado de PINKSIDE—. Por lo que las disculpas públicas deben tener tanta o más publicidad que la acusación, por lo que me gustaría discutir los términos de la misma. Alex, que es el real compositor ha sido públicamente afectado en su honra, denigrando su calidad como artista, consideraré su opinión con relación a su oferta y en una posible posterior acción legal.

—Acepto —respondió con seguridad el músico—. Sé que ganaríamos el juicio, pero también sé que eso nos seguirá atrasando, hemos tenido que suspender varias actividades y compromisos debido a esta demanda. El poco tiempo libre que disponemos he tenido que invertirlo en este caso, me siento cansado, sólo quiero volver a tener el tiempo para componer y para mí —dijo mirando con nostalgia la pulsera negra de su muñeca.

Tal vez yo, tal vez tú©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora