✡[16]☢

1.2K 135 117
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Esa misma mañana, Kyle fue a la escuela jodidamente cansado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Esa misma mañana, Kyle fue a la escuela jodidamente cansado. No había dormido en toda la noche, su cabeza le daba vuelvas, por lo tanto, se le complicaría el poder concentrarse en las clases. Era un maldito sonámbulo que actuaba de manera automática.

Antes de que el timbre sonara, el judío guardó algunas cosas en su casillero para poder sacar otras. Allí fue cuando, al darse media vuelta se percató de que tres jóvenes estaban de pie frente a él, observándolo con una neutra expresión.

Cuando Kyle los miró, no pudo evitar acordarse del pasado, hace seis años atrás... cuando aquel cuarteto era más unido que cualquier otro grupo de la escuela primaria. Sin duda alguna, el pelirrojo quedó tan desconcertado, que hasta casi suelta los libros que llevaba encima.

—¿Cómo estás, Kyle? —Fue su súper mejor amigo Stan el primero en hablar.

—Uh, bi-bien —titubeó, evitando el contacto visual con aquel trío a toda costa —. ¿Por qué la pregunta?

—Ya sabes, por lo de tu madre —dijo con tono suave —. Amigo, ¿Por qué no nos dijiste que estás pasando por un mal momento?

—Te sentimos distante, Kyle

Y al escuchar la última frase de Kenny, el pelirrojo hizo un breve contacto visual con Theodore, quien lo observaba con cierta curiosidad, obviamente, teniendo aquella expresión neutra. Broflovski realmente no pudo evitar sentirse completamente incómodo.

—Es que... ¿Cómo quieren que me acerque a ustedes, chicos? —cuestionó con un tono severo —. Ya no es la misma mierda de antes, todos tenemos nuestros propios asuntos de los cuales encargarnos... ya no hay necesidad de entablar una conversación, ni siquiera a la fuerza.

Entonces, al terminar su oración, Stan y Kenny se observaron por unos pequeños segundos para más tarde volver a plantar sus miradas en el judío.

—Este tonto está diciendo disparates —señaló el azabache con un tono burlón.

—Ni me lo digas... hasta comienzo a pensar que lavaron su cerebro en ese dichoso "internado"

Y mientras ambos amigos reían como si estuvieran en un circo, Kyle observó al castaño con una ceja enmarcada, quien no había formulado palabra alguna pero había estado escuchando toda la conversación a detalles. Y lo único que supo hacer, fue sonreírle al pelirrojo, con aquellos encantadores ojos entrecerrados.

៚AddictiveᝰDonde viven las historias. Descúbrelo ahora