Delta - BAKUTODO

Capítulo 010

"Ojos en la oscuridad"

—¿Lo logró jefe?—. Preguntó aquel chico, su voz gruesa pero suave resonó por toda la planta.

Al otro lado de la ciudad se encontraba una pandilla de al menos unos 30 hombres, regidos por su líder, el sujeto de cabellos castaños se levantó de la silla donde se encontraba y bajo con cuidado los escalones frente a él.

Su cabello castaño meciéndose sobre las pequeñas ráfagas de viento que se colaban por los grandes ventanales de la fábrica abandonada donde pusieron su base, se detuvo frente al chico viéndolo tensarse, los demás se mantenían callados, temerosos por lo que pudiera hacerle al pobre joven.

—Por supuesto que lo logre, y no sólo eso, está muerto—. Todos ahí abrieron los ojos con horror al escucharlo, más no dijeron nada, el miedo junto al respeto que le tenían era un logro que adquirió con los años.

Aquellos hombres -todos betas- lo felicitaron por su gran éxito y lo dejaron seguir hablando.

Al menos hasta que Hanji habló.

—Creí que quedaban pocos pura sangre en el mundo— todos los presentes dirigieron su atención a este, atentos por lo que pasara—, ¿No cree que debemos dejarlos en paz?

—Oh Hanji, si tan solo pudieras mantener la boca cerrada—. Su hebras castañas se meneaban al son de su risa, que pronto fue en aumento hasta que de abruptamente calló.

Un estruendo estalló, como si hubieran golpeado fuertemente una lámina de metal, el zumbido llegó segundos después, el resonar del eco aún se podía escuchar y los jadeos de sorpresa que soltaron no podían borrar la cínica sonrisa del líder.

Parado a 2 metros del castaño, un joven de cabellos azules sintió su estómago revolverse y, en un desesperado intento de apaciguar las náuseas terminó vomitando todo lo que comió, incluso lo que no.

El cuerpo de Hanji sobre el suelo, junto a un charco de sangre, y el arma en la mano del castaño fue lo último que vio el joven antes de preguntarse como una persona puede tener demasiada sangre, seguido de desmayarse.

Chisaki soltó una sonrisilla, esperando a que la segunda fase de su plan estuviera finalmente lista.

Solo debía esperar un poco más, solo un poco, lentamente pero con certeza la vida de ese estupido chico universitario llegaría a su final, no podía estar más alegre.

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—¿Kiri-bebé no se presentó a clase?—. Kaminari detuvo su andar para verlo directamente, cuando encontró al rubio le preguntó si había visto a Kirishima, Denki negó lentamente como si estuviera pensando, y cuando le dijo que no se presentó a la clase de Sako el rubio se alarmó.

—Que no, ¿Acaso eres sordo? Ya te lo repetí más de cinco veces.

—Perdón, es solo que Kiri-bebé no haría eso nunca, sus calificaciones no son las mejores y el intenta remediarlo con asistencias.

Y platicando sobre dónde podría estar caminaron hasta la biblioteca para hablar mejor, estando ahí se dispusieron de buscar a Kirishima, buscaron en toda la universidad, todos los posibles escondites en los que pudiera estar. Pero no lo encontraron.