—¡Explícame por qué verga me decís esto ahora!— Gritó y apoyó con fuerza el control en la mesa—Vos tenés cerebro para pensar en lo que podías hacer ¿No?
—Calmate.
—Calmame esta conchudo. Arruinaste una relación por tus pelotudeces.
—¿Pelotudeces? Igualito a tu novio sos— Se rió en un tono seco —. Hablando mal de relaciones ajenas.
—Y vos con tu novia metiendote en dónde tu orto no debía.
—¿Perdón? Solo queríamos experimentar.
—Tendrías que haber preguntado si queríamos ser parte de tu experimento estúpido. Porque aunque no me hayan preguntado a mi, yo estoy involucrado.
—Ibamos a preguntarte, no se dio el lugar.
—Dios, enserio seguís siendo un estúpido con el que no se puede hablar. Espero que alguna de las parejas con las que te metes te recagen bien a trompadas y más vale que te duela por hijo de puta.
[...]
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
○
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
○
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
○
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
○
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.