XII

443 48 27
                                    




No entendía el porque las señoras que vivían cerca de nosotros me miraban con una mueca de asco no muy notable. Había decidido salir a dar una caminata porque lo necesitaba, quería despejarme de todo lo que pasaba con Yoongi y además, había decaído. Pero él no lo sabía. El barrio donde vivimos es el mejor qué hay en Seúl, nuestros vecinos son políticos y artistas, tal cosa que no me interesa pero que debo de tener en cuenta debido a mi imagen, todos conocían a Yoongi y solían saludarlo, pero yo era invisible para ellos. Nunca me dirigían la mirada y esta bien, no es como que me moleste o sea triste.

— Escuché que tiene problemas por el bebé que perdió, una lástima — Había escuchado a una de esas señoras ¿porque les interesaba tanto mi vida? Trate de no darle importancia pero mi mente era tan traicionera que sabía que esto de verdad me afectaría, que esas palabras se quedarían en mí.

Seguí caminando sumergida en mis pensamientos, hasta que el teléfono móvil dio aviso de un mensaje de texto. Una vez más aquel número desconocido. Y de nuevo, una fotografía de Yoongi con aquella mujer. Mismo sitio, diferente día.

¿Porque él tomaba su mano? Parecían ser una pareja de casados, no iba a mentir. No solo era una foto, eran cinco. En diferentes posiciones pero en todas, Yoongi sonreía. Era raro que lo hiciera, quiero decir, siempre ha sido un hombre serio. Me sentía especial porque pensaba que solo me sonreía a mí, de esa manera tan linda, mostrando su dentadura perfecta. Lo único que hice fue soltar un suspiro, me sentí mal de inmediato, tan decaída pero no solté ni una lágrima. Tal vez ya estaba cansada, no había día que no llorara.

Regrese a casa con pasos lentos, pensando en todo pero a la vez deseando que no fuera así. Seque el poco sudor de mi frente con el torso de mi mano, el teléfono móvil volvió a sonar. Cinco fotografías nuevas, ahora Yoongi volvía a abrir la puerta de su auto para que ella se adentrara, había otra donde hicieron presencia en un hotel de lujo y entraban, tomados de la mano. Fue ahí donde si me solté a llorar.

Lance mi teléfono móvil a cualquier lugar del living, en ese momento mi mirada captó el foto retrato de nuestra boda, que hipocresía. Ni siquiera en aquella fotografía había sonreído. Me desplomé en el sofá en cuanto les había dicho a todos los empleados que se tomaran el día. Se que Min no llegaría temprano, por lo que decidí beber un poco de whisky a pesar de que no era de mi agrado. No se cuantas horas estuve sentada mirando hacía la nada, llorando y sintiendo el dolor de una traición, mientras yo me encontraba de patética, Yoongi estaba disfrutando su compañía. ¿Que hice para ganar esto? Siempre lo he tratado bien, le di amor y mucho, no había duda de mis sentimientos. Entonces, ¿que era lo que sucedía? ¿Acaso mi físico? Si, tal vez es eso. Aquella mujer es preciosa, alta y portaba un vestido muy lindo que le hacía resaltar su figura y bueno, todos los halagos posibles. Ahora pensaba en que excusa me daría Yoongi, entrar a un hotel de la mano con una mujer, es más que obvio que no se trata de negocios. Así de fácil.

Y Justo en ese momento, escuché el auto de él. Mi mano apretó con fuerza el pequeño vaso como si quisiera romperlo pero debido a mi fuerza sería imposible. Algunas lágrimas estaban totalmente secas en el momento que entró, pero de tan solo verlo, volvieron.

— ¿Que sucede? — Se atrevió a preguntar con un lindo tono de voz. Sonreí con sarcasmo sin perderle la mirada y bebí el último trago de whisky. Yoongi me miraba con preocupación, se deshizo de la corbata y el saco con un poco de rapidez y camino hacía mí.

— ¿Que fue lo que hice mal? — Le pregunté segundos después de tenerlo frente a mí.

— ¿De que hablas? Si es por el bebé, recuerda que en pocos meses podemos volver a intentarlo. Esta vez estarás acompañada de algunos doctores muy profesionales — Tomó asiento frente a mí, lo observé, en su camiseta blanca había una ligera mancha de lápiz labial en color rojo. Comenzó a deshacerse de sus anillos pero tuvo la excepción con el de matrimonio.

— Estoy embarazada, Yoongi. Se supone que debíamos esperar dos meses más — Sus ojos se hicieron pequeños debido a la gran sonrisa que manifestaba en su rostro. Se levantó con emoción y trato de abrazarme pero lo empujé.

— ¿Que pasa? — Hablo en tono fuerte y duro.

— De nuevo, estuviste con esa mujer. Ahora entrando a un hotel de lujo y tomados de la mano. ¿Que me dirás ahora? Una junta de trabajo, le tome la mano porque podía caer... — Solté una risita por lo bajo, solo estaba siendo sarcástica y creo que en cierto punto me encontraba ebria.

Yoongi me miró serio, no sabía que decirme. Justo ahora podía estar formulando la mejor excusa en su mente. Esta discusión a penas comenzaba pero el timbre de la casa sonó. Él abrió la puerta para darse a revelar su madre y la mía. ¿Que querían? ¿Porque no nos dejaban en paz? Parecía que querían controlar nuestro matrimonio.

— ¡Hey! ¿Estaban ocupados? — Exclamó mi madre pero su sonrisa se borro en cuanto se percató que mi rostro estaba muy mal por el sufrimiento — ¿Que sucede Sora?

— Que Yoongi te lo diga.

Frunció el entre cejo y miró a mi esposo. La dos mujeres lo miraban con intriga, él solo optó por pasar sus manos por el cabello una y otra vez.

— Está embarazada, debía esperar dos meses más.

— Oh hija, es es maravilloso. Bueno pero tendría a los mejores doctores para que lleve un estricto cuidado. ¿Verdad Yoongi? — Mi madre se sentó en el sofá a un lado de Youngmi.

— Si, se lo he explicado.

— ¿Algo más que gustes decir, Yoongi? Tal vez tu traición.

— ¿De que traición hablas?

— Su querido hijo, me ha engañado con una mujer. Mientras que yo estoy aquí como una patética, esperándolo con los brazos abiertos. Me han enviado fotografías — Mi madre soltó un sonido con su garganta dando a entender que estaba sorprendida por mis palabras.

Tal vez pensé que ellas me ayudarían por el simple hecho de ser mujeres, porque estaban casadas desde hace muchísimos años. Pensé que me ayudarían, de verdad que lo hice. Pero lo único que me dijeron fue: "Es hombre, Sora. Tiene muchas mujeres a su alrededor día con día y es obvio que esto suceda pero no por ello deben separarse". Fueron las palabras más horribles que he escuchado, ¿solamente por el simple hecho de que es un hombre yo debo perdonar su engaño? Lo peor de todo es que las dos estaban de acuerdo, me dijeron que solo habláramos y lo perdonara.

Yoongi me confeso que solo habían sido besos pero que más allá de eso no. Ni siquiera habían entrado a una habitación, me prometio mostrarme las cámaras de seguridad. Y cómo tonta que fui, lo perdoné. En cuanto empezara mi segundo mes de embarazo, se tomaría el tiempo para estar conmigo.

Pero aún así, el dolor seguía. No sabía que me sucedía ni el porque todos los días me echaba a llorar tan fuerte. Sabía que estaba decayendo. Así que tomé una pastilla para sentirme mejor. Sería la última vez que la tomaría, era un antidepresivo. Todo hacía mal, todo estaba mal conmigo. Por ello, Yoongi miró a otra mujer.

Louder Than Bombs ✘ Min YoongiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora