Star Wars : La Jedi Gris

Sangre, Victoria o Muerte

La superficie áspera del buró esta helada,su tacto pasa a través de la tela, trayendo el frío del amanecer en Gnesis dentro de su piel;la niebla empapa de humedad y bruma los rededores , vela la errática y demente batalla que le ruge en los oídos. Codyan se estremece.  

Tirita y chasquea los dientes ,sus dos manos aprietan su pierna izquierda por encima de la rodilla. Tratando inútilmente de hacer una frontera y mantener el dolor agudo y ferviente al margen.  Náuseas retuercen su estómago y mandan un  revoltijo a su garganta, esta febril a pesar de los soplos rapases que le erizan la piel, bisquea y solo puede dar respiraciones toscas.

Mira al cielo con los ojos empañados, incapaz de soportar la visión de su mutilación.  

Los párpados le pesan, se muerde el labio y sacude la cabeza. Nunca había tenido tanto miedo de la oscuridad. Pero también le aterra permanecer despierto y tener que enfrentar algo muchísimo peor. Le da pánico pesar que Cassio Idylla vuelva.

Quiso que Devika estuviera ahí.

Deseo con locura que apareciera cuando Cassio lo hizo. Que usara sus sables para impedir que le cortara parte de la pierna. Pero no había llegado,y Cassio se había reído diciéndole que su hermana estaba muerta.

Eso no podía ser verdad.  

Codyan gimoteo pegando su cabeza contra la rodilla sana,un sordo calambre entumeció y apuñalo en todo lo que le queda de la extremidad. Su cabeza se apoya contra la pared ,sus ojos ya abierto se amplían.  Su preocupación se mezcla con el dolor, entrañando desespero. Quería que dejara de doler.

Puntos alargados siguen invadiendo el cielo, centellean y emiten destellos luminiscentes; son naves,  y para que pueda verlas a esa distancia, han de ser muy grandes. Codyan escucha los lásers, un zumbido rápido que rompe en un solo pitido. Oye también las voces, los pasos, las colisiones y derrumbes. Las explosiones son lo que peor le ponen, su estruendo imprevisto y potente es exagerado por sus oídos ,lo aturden y alertan como nada más. Quiere que termine.

....  

El esplendor de la entrada al mundo entre mundos no es visible, las gruesas puertas de piedra y metal con glifos permanecen  fuertemente cerradas. La túnica gris de Claironyx yace en el suelo de la cámara,tirada y sin forma, la sangre apenas derramada aun se saborea en el aire.

La espada láser de Darko no irradia luz. Pero chispea cortando y derritiendo una veta mientras camina hacia la luz purpurina de los sables de doble filo de Devika. Ella le sigue con la mirada esperando el inminente zarpado.

Se miran el uno al otro, el zurrido de los arboles y la pelea en el exterior no los alcanzan. El silencio es tenso y crepita amplificando cualquier gesto o inclinación.  El piso tiembla y la paredes le siguen, ninguno se inmuta.

--Interesante--musitó Darko saboreando la palabra con estudiada curiosidad. -- Y muy curioso. Regresaste de la muerte-..

--No hay nada de curioso o interesante en ello. Tu también lo has echo-. Giro blandiendo un sable y luego el otro, Darko se defendió despreocupado con la espada.

Devika aterrizo,movió las muñecas acomodando los sables para resguardar su cuerpo.

La calma férrea se tambaleo en los ojos sin brillo, sus pupilas se llenaron de un minúsculo  punto . Y en  él había una legión de infiernos. Mando la espada en un veloz tajo que trazo un arco muy cerca de los ojos de Devika, ella esquivo al tiempo .-- No te confundas, pequeña intento de Guardiana Neutral. Yo he aprendido a engañarla. Tú la has dominado. --Darko cerró el puño, Devika chasqueo la lengua y curvo los dedos de los pies  al ser arrastrada hacia él.