Star Wars : La Jedi Gris

Convergent

El sable azul de su tío quema aire. pensó, que tantos años de auto confinamiento en Ach-to , desgastó sus habilidades como guerrero. Pero, no era así. Blande el sable , ahora de su pertenencia, desde la destrucción del suyo. El haz verde, una vez de la hermana de su abuelo aparta sordamente el de Skywalker. Siguen si asimilar como misteriosamente el sable apareció en sus palmas al pelear con Cassio Idylla.

Las miradas de desconocidos se ciernen sobre ambos,su pelea los eclipsa, más que las naves de la Primera Orden precipitándose por encima de sus cabezas. Le advirtió al Jedi de no acercarsele. De no mirarlo ,y sobre todo, de no dirigirle la palabra. El esfuerzo de autodominio que muchos consideraban en él deficiente había alcanzado sus límites,cuando ,muy tranquilo, Luke Skywalker se le acerco a hablar de su abuelo.

Evade el arco iridiscente en que Skywalker mueve su sable. La ira burbujea contrayendo su garganta, afinando su visión y potenciado la fuerza de sus movimientos. Pero no se deja llevar por ella como es su costumbre, respira y arremete. Esto no puede terminar rápido, no estuvo buscándolo por años solo para que se esfumara en un parpadeo. Aún tenia el peso de su venganza. Un susurro más allá de él y aún más adentro, que le recuerda que tiene derecho a matarlo. Pero, ya no esta tan seguro , de que sea eso lo que quiere.

La brisa en Craif es fría y el aire turbulento de una contienda entre dos ejércitos solo acrecenta la sensación. Ninguno deja de moverse, no hay palabras, sus sables lo dicen todo. Ben logra herir del hombro a Luke Skywalker. Inevitable, Kylo no se estaba conteniendo, no como su tío. Devika contempla en la fracción de un segundo ,los ojos sorprendidos del Jedi y la tensión de su mandíbula, sus dedos se aprietan en su sable y vuelve contra su sobrino. Rey acaba de aparecer por la compuerta Este ,a su lado Leia y Han Solo.

La chica de Jakku aparta sus ojos de la pelea,aunque la fuerza le permite leer lo que siente, no la necesita, los ojos avellana de la chatarrera son demasiado legibles, esta preocupada y se siente culpable. Han Solo no pierde la compostura, camina erguido ,con esa expresión tozuda más marcada. Lo que le indica a Devika, de que él como ella, esperaba que esto sucediera.

Leia no es capaz de mantener el ritmo apresurado de las zancadas, del padre de su hijo. Sus manos entrelazadas y las cejas arqueadas hacia arriba en el puente. Con el miedo que solo puede sentir una madre y una hermana.

Devika vuelve a ver a los parientes en duelo, el siseo familiar de los sables le erizan la piel, no puede recordar un día de su vida que no haya sido orquestado con ese zumbido. Tiene el ceño fruncido,sintiendo la fuerza bordeando a Ben y a Skywalker,los brazos cruzados y las uñas no muy largas clavándose en su piel. No podían escoger peor momento para un ajuste de cuentas. Pero no va a intervenir. Si alguien se le hubiera atravesado durante su pelea con Cesarius ,seguramente habría encontrado su muerte o una visita al médico para una prótesis.

Ben necesitaba desahogarse ,y Kylo tenía que satisfacer su rabia.

--Hay que separarlos --musita Rey. su voz traiciona la calma de su cuerpo,mostrando cuanto le agita el bienestar de ambos. Sus ojos viajan de vuelta a los sables que cada segundo se acercan más a los portadores,y luego regresan a Devika. Rey la escruta de pies a cabeza .La Emperatriz de Convergent viste de negro, lo que hace que su apariencia albina brille y la oscuridad de sus prendas sea dramática. Ve la pelea entre el chico que Rey quiere ayudar y conocer contra el hombre arisco pero sabio. El interés en sus pupilas platino no es algo que entienda y le molesta. Su respuesta le sienta peor.

--Separalos tú--

Rey abre los ojos al tiempo en que entreabre los labios incrédula. No la considera su amiga, apenas, quizás una aliada. Pero Ben se negó a irse de la Supremacia sin sacarla de allí. Y después ,cuando estuvo débil en la nave fue su maestro el que explico a Ben como ayudarla. Si no podía ser agradecida al menos debería sentirse en deuda. Le salvaron la vida.