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Capítulo 15: Confía en mí.

Antes de que pudiera siquiera responder, escuchó la voz aterciopelada de Jackson.

-Stiles. Estás aquí. Justo ahora iba a buscarte.

Surgió de entre las sombras hasta llegar a su lado. Derek dirigió a Stiles una mirada de advertencia pero él lo asesinó con los ojos.

-Derek. Por supuesto. Debí suponer que estarías castigado, siempre lo estás.

Lo dijo en tono de burla, pero sus palabras parecían aludir a algo más serio.

-Todo lo contrario a ti, Jackson.

La voz de Derek rebosaba desdén cuando empujó a Jackson al pasar y echó a andar enfadado hacia el colegio.

-¿Ha pasado algo? Pareces disgustado.

-No ha sido nada -lo tranquilizó Stiles mientras veía a Derek desaparecer por la oscuridad del bosque. Jackson lo siguió con la mirada.

-A veces actúa como un imbecil, ¿no? -Stiles lo miró sin entender-. Creo que esa palabra lo define a la perfección.

Stiles no entendía el por qué ambos chicos se llevaban tan mal, pero no consideró prudente preguntar. No por el momento.

-¿Y qué tal te ha ido en el castigo? ¿Espantoso?

-No ha estado tan mal. Solo me ha salido una ampolla, mira.

Levantó la mano derecha, en cuya palma sobresalía una pequeña burbuja blanca, justo en la base del dedo índice.

-Qué tragedia -se llevó la mano de Stiles a los labios y la besó con suavidad. Él se estremeció. De nuevo aquellos escalofríos-. He pensado que no deberías trabajar más con las manos. No va contigo. Deberías tener empleados que te sirvan la comida mientras te vistes de seda.

La insensatez de aquella idea le hizo soltar una carcajada.

-Sí, claro, podrían pelarme uvas mientras yo cuento mis diamantes.

-Así es. Ríete ahora, Sti, pero podría pasar -sin soltarle la mano, Jackson lo guiaba por el sendero-. Por desgracia, esta visita no es solo por cortesía. He venido a buscarte por petición de Peter. Quiere verte.

A Stiles se le hizo un nudo en el estómago. No le sorprendía para nada que Peter quisiera verlo, puesto que lo habían castigado. Sin embargo, había albergado la esperanza de no meterse en problemas serios, para variar.

-Muy bien -se resignó-. Supongo que era de esperarse.

Andando junto a él, se volvió a mirarlo.

-En cuanto a...

-Ah, sí -lo interrumpió Jackson leyendo sus pensamientos-. Aquél ataque brutal en el jardín.

Se estaba burlando, pero Stiles hablaba en serio.

-Créeme, escuché pasos. No sé por qué, pero estoy convencido, bueno, o mi cerebro lo está, de que alguien estaba siguiéndonos. No entiendo bien esto porque es muy nuevo para mí, pero de verdad. Lo siento.

-Stiles, creo que las pisadas que oíste fueron las de Liam y las mías -supuso Jackson-. Y lo que te pareció escuchar debió ser un zorro.

-Okay, comprendo que no es un lobo. Supongo que entre ustedes se entienden -Jackson lo miró con una ceja alzada, con cara de «¿En serio, Stiles?»-. Pero ¿un zorro que gruñe?

-Quizá quedó atrapado en algún cobertizo y se quejaba -Jackson se encogió de hombros-. A veces pasa.

Stiles miró a Jackson sin parpadear.

Waterhouse Academy | SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora