Harry Potter... ¿Me ama?

1. Ron, dios del pollo.

- Oh... Dios ¡MIO!

- Malfoy, ¿quieres callarte? Llevas literalmente media hora diciendo lo mismo, ¿que pasa? - Decía un morocho irritado

Luego del shock con lo leído, nuestro pequeño hurón albino se fue a cenar al gran comedor. Para poder satisfacer su incomodidad con comida, lo típico. Aunque como vieron, cada cinco minutos soltaba frases de sorpresa.

- Blaise tiene razón, ya cállate y termina ese pollo, o lo comeré yo. - Decía un pelirrojo.

Así es, Ron Weasley y Draco de alguna inexplicable manera, eran amigos, muy buenos amigos.

- Que haces aquí Ronald? - Preguntaba una confundida Pansy.

- Es sábado, Daa. - Pero al ver a la chica más confusa aun, prosiguió. - Te olvidaste, que los sábados me siento con ustedes? Vamos niña, ya son tres meses.

- Ash, olvídalo. - Contesto indignada.

Luego de un rato de silencio. Obviamente entre ellos, ya que el comedor silencioso no iba a estar. Draco reaccionó. Claramente, recordó que Ron es el mejor amigo de Potter.

- Ronald Weasley! - Soltó el rubio.

- Blaise se comió tu pollo. - Dijo el pelirrojo exaltado.

- Ey! - Replicó este.

- Ven Ron, debo hablar a solas contigo.

- Oh mí dios... Te me vas a declarar... - Hablo burlonamente, recibiendo una leve palmada en su nuca. - Ouch... Vamos.

Draco se lo llevo a los pasillos, que en ese horario estaban casi vacíos.

- Suéltalo Malfoy.

- Es sobre Potter.

- Draco, no voy a decirte sus debilidades, recuerda que también es mi amigo, mi mejor amigo.

- Pero!... Ah no espera.... ¡No es sobre eso! - Reclamo la serpiente.

- Oh... Entonces...?

- Harry es gay?

En eso una estruendosa carcajada brotó del Weasley.

- JAJAJAJA O DIOS MÍO JAJAJA NO SABÍA QUE JAJAJA QUERIAS LIGAR A HARRY JAJAJA.

- QUE?! CLARO QUE NO! QUE PORQUERIAS DICES?! HARRY GUSTA DE MI! - Soltó finalmente

- JAJAJAJAJ. ESPERA QUE?!

- Harry tiene un... Diario íntimo...?- Pregunto algo incómodo.

- Si... Pero que tiene que ver?

- Eres lento Ron. - Dijo cruzando sus brazos en modo de espera.

Luego de un par de minutos una cara sorprendida nació en Ron.

- Leíste el diario de Harry! Donde confiesa que te ama! - Dijo casi a los gritos.

- RONALDO!

- ES RONALD!

- PERO BAJA LA VOZ!

- TU BAJA LA VOZ

- AAAAHHH

- AAAAAAHHH

Ambos callaron cuando notaron una chica los miraba confusa.

- Entonces... Es verdad?

- Eso quería preguntarte.

- Pues nunca me dijo nada...

Ambos frotaron sus barbillas mirando hacia el techo. Hasta que el rubio agrando los ojos como platos.

- ES VERDAD! - Hablo Draco.

- Pero nunca me lo dijo. Aun que yo soy tu ami... ES VERDAD!

Y luego otros varios minutos de pensamientos raros.

- Oye Draco... Dame el diario, así lo leo... Digo, se lo devuelvo a Harry.

- Pfft, si como no. - Escupió burlonamente.

- Y para que quieres leer el diario? Acaso... te interesa saber de Harry? - Dijo con mirada amenazante, pero también burlona.

- Tu no me quieres decir los puntos débiles de Potter. Así que los conseguiré por mi cuenta.

- Le dire a Harry!

- Le dices, y me comeré cada maldito pollo que aparezca en tu plato Weasley.

Eso era una gran amenaza.

- No te atreves...

Pero antes que dieran alguna palabra más, Draco salió corriendo.

- Recuerda Weasley. - Gritaba mientras se alejaba. - Todo por el pollo!

Ron se dirigió a su sala común fastidiado, y no, no diría nada. Ya que Ron hace lo que sea por el pollo, y, su mejor amigo no le hablo sobre su amor. Y pues obviamente si se lo diría, esta historia acabaría aquí.