Una sonrisa [Law X Lectora]

Capítulo 7

Rápidamente levantaste la cabeza para comprobar que habías escuchado correctamente. Si, Law estaba de pie junto al marco de la puerta mirándote fijamente.

-¿Que viniste a hacer?

-Estaba pensando desde hace rato en lo que dijiste ¿podría amarte de la forma en la que tú me amas?

Te avergonzaste al recordar tus propias palabras, las habias dicho en medio de un momento tenso donde muchos de tus sentimientos explotaron a la vez.

-Yo no quise decir-

-____, me di cuenta de que probablemente ya lo hago inconscientemente.

Tu corazón comenzó a latir desenfrenado, no querias hacerte ilusiones con sus palabras pero controlar tus sentimientos era algo imposible para ti misma. Law te atraía de cierta forma, aunque al comienzo hubiera sido un total asco de persona solo quería abrirte los ojos porque no quería verte sufrir.

Notaste que en realidad él si te quería.

Él se sentó en el borde de la cama, seguía mirándote fijamente asi que tú simplemente te echaste hacia atrás conservando así el espacio entre ambos.

-¿Y que con eso?

-¿Tambien planeas mantenerte al margen en este amor? Ya dije que te amo, te amo demasiado ____.

Hundiste nuevamente el rostro entre las almohadas. Hacía tiempo que no te sentias de esta manera, avergonzada pero feliz. Tener una confesión tan apasionada hacía que tu pecho vibrara de emoción.

-Siempre me llamó la atención la forma con la que mirabas a Sanji. Me preguntaba como me sentiría yo si fuera observado de la misma forma, con esos hermosos ojos llenos de amor.

Al escucharlo fuiste lentamente levantando la cabeza. Law se acercó lo suficiente para poder susurrarte en el oído.

-Hace un rato cuando nuestras miradas se encontraron debajo del paraguas lo supe con certeza. Deseaba tenerte para mi, deseaba besarte.

Tus mejillas se calentaron y casi te desmayas al escuchar eso. Tenerlo susurrandote al oído no mejoraba la situación.

-Ahora quiero que me respondas con sinceridad. ¿Tú me quieres aunque sea un poco? ¿Deseas... besarme?

En realidad no tenías palabras para expresar lo que sentías en esos momentos. Solo te acercaste a él lo suficiente para quedar sentada a su lado. Law, con una mano, apartó unos mechones que le impedían ver tu rostro a plenitud.

Las miradas estaban conectandolos, no hacian falta las palabras cuando podían decirselo todo de esa manera. Ya no podías seguir mintiendo con respecto a lo que sentias, Law estaba siendo totalmente sincero contigo.

-Yo... Law yo...

Ni siquiera pudiste terminar de hablar porque los desesperados labios del pelinegro te robaron el aliento. Tu corazón se volvió una nube maleable de sentimientos amorosos al sentir que realmente Law quería estar de esta manera contigo. Te besaba de forma lenta, haciéndote temblar con cada uno de los movimientos.

Era la primera vez que te besaban con tanta pasión.

Sus manos acariciaron tu espalda lentamente causandote ligeros escalofríos de placer. Lentamente fuiste recostandote en la cama quedando así Law sobre ti. Pasaste los brazos por detrás de su cabeza intentando acercarlo más a ti, jadeaste por ello y Law aprovechó para introducir su lengua en tu boca.

-¡Alto ahí!- ese grito hizo que se separaran automáticamente.

Nami había entrado con Kanata en brazos a la habitación, tenía cara de querer matar a alguien.

-Entiendo que la beses para arreglar el malentendido amoroso que tuvieron ¡pero no doy permiso para que le robes su tesorito! ¡Aún es muy pequeña para ello!

Fue inesperado y Law se avergonzó muchísimo, su intención no era esa pero aún así se cohibió por la repentina intervención de tu hermana.

-¡Tesorito!- gritó Kanata que estaba, al parecer, tan molesto como su madre.