-Haré todo lo que sea necesario-Dije mirándolo a los ojos, el llevo la vista a otro lado-Viviré todo lo que viviste solo para recuperarte
-Te aburriras rápido, te conozco mejor de lo que crees-Dijo. Se dio la vuelta y salió del salón, dejándome solo...
No entiendo...Muchas veces le pedí a cualquier Dios que Chimon dejara de seguirme y que se conformara con ser solo mi amigo, pero ahora que el dejo de seguirme...me siento raro.
Los primeros días se sintió bien, pero poco a poco ese sentimiento se convirtió en molestia. Molestia de que no me hablara, que no me mirara, que no me sonriera como lo solía hacer; Sus labios rosados curvándose hacia arriba y su mirada iluminada.
Necesito saber la razón de ese cambio drástico. Intente dejar de lado la situación, pero cada que mi mente puede me lo recuerda.
No fueron muchos días, pero mi cabeza funciono demasiado, pensé, imagine y llegue a la conclusión de muchas cosas: Como que Chimon es parte muy importante en mi vida, así que no puedo dejar que simplemente se aleje, no lo voy a permitir.
—Tu y yo—Me señale a mí y después a Chimon— Tenemos que hablar. Quieras o no, la comida puede esperar—Estire mi mano y agarre su muñeca.
—¡No...No! —Empezó a gritar—Hambre...Comida...Ayuda—Miro a los otros tres.
—Nanon, déjalo comer—Intervino Ohm.
—Puede comer cuando terminemos de hablar—Lo vi abrir la boca, pero lo jalé hacia mí, provocando que solo saliera un chillido de su boca. Mire su cara y me resistí a sonreír cuando vi el sonrojo en su cara, era muy adorable. Espera... ¿Qué acabo de pensar?!—Me importa un comino si pierdes clases, por una clase no vas a perder el semestre—Antes de que dijera o dijeran algo más caminé a la salida jalándolo conmigo
—¡Nanon! ¡Suéltame! —Lo escuché gritar atrás de mí, yo hice caso omiso—Me estas lastimando—Aflojé un poco el agarre que tenía sobre su muñeca.
Entre en el primer salón que vi vacío. Me di la vuelta aun sujetándolo.
—¿Qué quieres, Nanon? —Me miro a la cara.
—¿Que quiero? Quiero que hablemos. Me molesta que parezca un desconocido para ti, parece que no llevamos toda nuestra vida conociéndonos—Trate de no sonar enfadado, pero en realidad lo estaba.
—No sé a qué te refieres—De un jalón quito su mano de mi agarre. Junto sus dos manos para jugar con sus dedos, siempre lo hace cuando está nervioso.
—Eres demasiado malo mintiendo. Conozco tu cara y movimientos cuando lo haces, recuerda que te conozco desde hace mucho tiempo—El rodo los ojos.
—Lo que digas Nanon...Lo que digas—Dio un suspiro.
—Vamos, confía en mí, hemos sido amigos desde hace mucho tiempo—
—Claro, "amigos" —Fruncí el ceño al ver como hacia comillas—Los amigos no hablan mal del otro a sus espaldas—Sentí una punzada en mi pecho al ver como sus ojos se cristalizaban—Pero ahora es humillante, ser su "amigo" es suficiente, Chimon es demasiado... irritante, infantil, ingenuo y muchas cosas molestas, ya estoy harto de el—No, no. Esas...Esas son mis palabras. No puede ser...
—No...Chimon, yo no...—Trate de hablar, pero el me interrumpió.
—No quiero escuchar excusas. Entendí perfectamente ese día. Ahora puedes coquetear cuando y donde quieras sin que yo esté en medio—Limpio bruscamente las lágrimas que se escapaban por sus ojos.
—Chimon, por favor déjame hablar. Déjame explicarte y arreglar esto, por favor, por favor—Trate de atrapar sus ojos, pero estos viajaban por todos lados.
—¡No te entiendo! —Grito. Su expresión mostraba lo dolido que estaba—Lo más seguro es que todo este tiempo has rezado porque te deje en paz y ahora que lo estoy haciendo vienes y me reclamas, ¡como si en verdad te importara! Como si esto te importara—Sentí algunas lágrimas bajar por mi cara—Como...Como si yo te importara—En ese momento se rompió en llanto. Di algunos pasos hacia él. Quería limpiar las lágrimas que caían por sus mejillas y abrazarlo, como lo hacía cuando éramos pequeños, pero el se hizo para atrás. Me detuve al ver su acción.
—No te acerques, por favor, no te acerques—Suplico, cosa que me partió más el corazón—Tu...Tú sabes...que soy débil cuando se trata de ti—
—Vamos a arreglar las cosas, para que todo vuelva a ser como antes—Rio sarcásticamente, su risa salió con algunos hipidos.
—¿Para qué? ¿Para que vaya atrás de ti como cachorrito de nuevo? ¿Para qué vuelvas burlarte de mí? ¿Para que me lastimes una y otra vez? —Estire mi mano hacia él, para que la tomara, pero la rechazo—Ya fue suficiente humillación para lo que llevo de vida—
—No es así Chimon. Ese día yo no quise decir eso. Sabes que eres muy importante para mí, de todos eres el más importante—
—Deja de mentir, ¡Ya basta! Lo que dijiste fue con todas las intenciones del mundo. Si en verdad te importara jamás hubieras dicho eso de mi—Abrí la boca, pero el negó—No hay nada mas que decir, solo dejemos hasta aquí nuestra amistad o lo que fuera que tuviéramos—Esta vez yo negué. Se que fui un idiota un gran idiota, pero no voy a permitir que se aleje de mi vida. Mi mente me pide que no lo permita y yo le voy a hacer caso a esta—Te voy a dejar en paz. Podemos seguir conviviendo, tenemos el mismo circulo social pero no es necesario hablar, ni fingir que nos llevamos bien—
—Por favor...Por favor no. Chimon no puedo simplemente alejarme de ti, eres parte esencial de mi—
—Ni tú te crees esas palabras, Nanon. Fue lindo lo que vivimos juntos. Gracias por fingir ser mi amigo y fingir que me "apreciabas" —Aprete la mandíbula, no estaba saliendo como esperaba.
-No te voy a dejar alejarte Chimon. Haré todo lo que sea necesario-Dije mirándolo a los ojos, el llevo la vista a otro lado-Viviré todo lo que viviste solo para recuperarte a ti y a tu confianza—
-Te aburrirás rápido, te conozco mejor de lo que crees-Dijo. Se dio la vuelta y salió rápidamente del salón, dejándome solo.
Sonreí mirando la puerta. Él no era el único que sabía cosas del otro.
Está vez yo iría tras él. Se que los sentimientos no desaparecen de la noche a la mañana.
