My Turn NaMon

Contar

Las palabras de Nanon parecen pegadas en mi cerebro, como si jamás fueran a salir.

Se que debería hablar con ellos, pero no puedo, cuando abro la boca un sinfín de cosas malas llegan a mi mente y al final solo me callo.

—¿Nos vas a decir que te pasa o te lo vas a seguir guardando? —Mire confundido a Ohm cuando golpeo mi hombro.

—¿Decirles que? —Pregunte fingiendo confusión.

—Lo que tiene mas baboso de lo que ya estas—Contesto First, Tan amable como siempre.

—No es nada, solo son cosas de la clase—No se si pueda decirles realmente lo que me pasa.

—¿Por qué no nos dices que cosas? Podemos ayudarte, para eso estamos—Dijo Fluke—Aunque es obvio que la escuela no te trae así, pasas los exámenes con 10, sin siquiera estudiar—Suspire. Solo quiero que dejen este tema de lado. Es el único tema de conversación que hemos tenido estos días. Los quiero mucho, pero me urge que olviden todo el problema—Solo dinos y ya—

—¡No es nada! ¿Cuántas veces se lo tengo que decir? ¡NO ES NADA! ¿PUEDEN CALLARSE? POR FAVOR —Dije de manera exaltada.

Abrí los ojos como plato al ver la cara de mis amigos. ¿Ese fui yo? ¿Les grite? Ahora también estoy avergonzado. Soy alguien bastante pacífico y tengo alto grado de tolerancia, pero no se qué acaba de pasar.

Baje mi mirada y nos mantuvimos en silencio, que por primera vez desde que nos conocemos fue incómodo.

—Y bueno ¿Qué están viendo en sus clases? —Pregunto Nanon, hablando por primera vez desde que llego

Mantuve mi cabeza baja mientras ellos hablaban. Mis ojos empezaron a picar y sentí un nudo en mi garganta. No debí hablarles así a mis amigos. Ya me imagino de lo que podrán hablar cuando estén solos:

Solo tratábamos de ser amables con él, pobre

Debe ser bipolar

A veces me da pena.

Limpie mis ojos, me levante y los mire como pude. Si sigo aquí mi cabeza va a explotar.

—Tengo...Tengo—Me quede callado algunos segundos pensando en alguna excusa para irme—Tengo que ir al baño, me duele el estómago—Mire a First—Te veo en clase—Camine a la salida de la cafetería sin esperar respuesta.

(...)

Me miré en el espejo y me sentí peor. Tengo grandes ojeras, que cubren casi toda la parte baja de mis ojos, estos últimos están demasiado rojos y cristalizados y mi piel se ve más pálida de lo que ya es, fácil podría hacerme pasar por un zombie.

Al escuchar la puerta ser abierta gire mi cabeza al lado contrario

—¿Chimon? —Al escuchar es voz recé a DIOS que me dejara, que no fingiera que le interesa—¿Esta todo bien? Te has comportado muy raro—

—No es nada Nanon, ya les dije que no es nada—Limpie mis ojos con mi brazo derecho.

—Y eso nos dice que no estás bien. Nunca te habías comportado así y mucho menos la forma en que nos hablaste—Escuche sus pasos más cerca de mí.

—¿Podrías dejar eso? —Respire profundamente y alce la vista.

—Hey, soy tu amigo, nos hemos conocido toda nuestra vida, puedes confiar en mi—Note como analizo mi cara, cosa que hizo que quisiera llorar aún más. Ante su mirada soy débil, los sentimientos no desaparecen en segundos y menos los que tengo por él.