I GET TO LOVE YOU LIBRO #2 DE LA SAGA FIND YOU - MALEC

C E N A

Magnus caminaba de un lado a otro, ¿Qué pretendían Asmodeo y Rafael con esa cena? Dios, suspiró, él de verdad no quería estar allí, temía lo que podría pasar, hace unos días su hermano le había llamado para informarle que su tío había planeado una cena para conocer a Alexander, Magnus temía que nada bueno saliera de esa cena, lo peor, no sólo estarían en la cena Asmodeo, Rafael, Elara, Magnus Y Alec, había decidido que la cena sería con todas las personas cercanas.

Miró la hora en el reloj de su muñeca, en media hora debían llegar los invitados, observó a su hija quien feliz y sin saber nada, ajena al mundo jugaba con un peluche y otro muñecos, junto con Jul, Will y Jem estaban en conversación con Asmodeo, Rafael sólo estaba en el bar tomando whisky, solo esperaba que no se emborrachara.

— ¿Papi estás bien? — Elara preguntó desde dónde estaba con sus juguetes

— Sí, estoy bien, solo un poco aburrido — le sonrió calmándola

— Ven a jugar conmigo, así no te aburres — ella estiró en su dirección un peluche grande de un reno, ese peluche había sido un regalo navideño, le asombraba que aún lo conservará en tan buen estado, pero Magnus podía presumir que su hija era muy cuidadosa

— Juguemos entonces — se sentó cerca de ella y comenzaron a jugar al té como en Alicia en el país de las maravillas, los minutos pasaron y Magnus sintió que algo de la presión se desvanecía, cuando menos lo espero el timbre estaba siendo soñado.

Observó la puerta por la cual entraron Jace, una pelirrojo, Gian y Alexander, detrás de ellos venía Isabelle, su rostro lucia cansado, Magnus pudo ver que ella parecía triste, quiso saber el por qué, y creyó saberlo cuando vio detrás a Simon, lucia muy parecido a ella, aunque sus ojos se veían rojos, como si había llorado.

Ellos lucían complicados, suspiró, su hermano salió de donde estaba desde hac mucho tomando, Magnus camino hacia él y lo tomó del brazo, mientras Asmodeo se presentaba a sus invitados.

— Cuidado con los que haces Rafael — le dijo en voz baja

— Te preocupas por él — se burló

— Me preocupo por mi hija y por ti, porque no quiero vea a su tío haciendo alguna estupidez contra su padre, por favor — susurró

— No deberías seguir amándolo, me preocupa que te dañe otra vez, ese hombre solo conoce destruir, puede dañar a tu hija, él es un monstruo — casi quiso gritar

— Yo sé que hay algo que no me quieres  decir, sé Perfectamente, habla conmigo Rafael, soy tu hermano, te quiero por favor confía en mí — le dijo

— ¿Cómo podría? Le creerás a él, lo sé, dime Magnus, ¿Él te dijo que lo que oculto, él no es culpable? — Magnus guardó silencio, porque era así, Alec le había dicho

— ¿Lo ves? Nada que diga hará que cambies respecto a él — dijo con un tono amargo

— No lo sabes — Magnus se alejó de Rafael, su cabeza comenzaba a dudar, ¿Alexander había hecho algo muy malo a Rafael? ¿Le había mentido Alec?

— Hola Magnus — saludó un alegre Gian — ¿Estás bien? Pareces tenso, pensativo

— No me analices — le dijo, desde su conversación unos días atrás, ellos había adquirido más confianza

— No lo hago, tu hija de cinco años podría darse cuenta con sólo ver tu rostro — le dijo, Magnus suspiro y trató de cambiar su rostro

Ambos caminaron hasta la mesa donde estaban los demás, el ambiente parecía tenso, tan fingido.

Observó el rostro de Will que clavaba dagas con la mirada a Alec, mientras este sostenía a su hija en brazos, pensó en quitársela, pero se abstuvo, tomó asiento a su lado, dejando espacio entre ellos para Elara.

Su tío observaba a Alec, quería salir de allí junto con su hija y no exponerla a semejante drama.

Pronto todos, a excepción de Rafael se sentaron en frente a la mesa, la cena fue servida.

Jace decidió hablar, rompiendo el incómodo silencio. — ¿Entonces usted es el tío de Magnus? — preguntó, pero Magnus pudo ver que había algo detrás de las palabras de Jace

— Sí, así es — respondió Asmodeo

— Es increíble que usted haya cuidado a sus sobrinos, lo poco que sé es que su hermano y esposa murieron, así que usted los cuido — dijo Jace

— Es verdad, para mí ellos son como mis hijos, siempre procuro por ellos — dijo el hombre

— Eso es muy noble — sonrió Jace, luego el silencio volvió a reinar en aquel enorme comedor

— Papi — le habló Elara a Magnus en un susurro, Magnus la volteó a ver y le sonrió — ¿Dónde está mi tío? — dijo refiriéndose a Rafael

— Ya vendrá, está resolviendo algo — le dijo, ella solo asintió y volvió a su comida

Y así es un horrible silencio que solo era opacado por el sonido de los cubiertos, y algunas risitas de Elara o Jul, nadie decía nada, desesperante, pensó Magnus.

Escuchó el sonido de algo rompiéndose y todos se levantaron de la mesa, caminaron a la sala y se escuchó una maldición.

— ¿Rafael estás bien? — se acercó Magnus. Pero este lo alejo de un manotazo

— ¡Papi! — gritó Elara al ver a su padre ser empujado

Él la tomó en brazos — estoy bien — le beso la mejilla
Asmodeo quien había visto la escena se acercó a Rafael, lo tomó del brazo y lo sacó de allí.
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— ¿Se puede saber qué demonios te pasa? — exigió saber

— No me regañes, no tienes ningún derecho — hablo con burla Rafael

— Si lo tengo, compórtate Rafael, acabas de lastimar a tu hermano frente a tu sobrina y otras personas más — le dijo

— No me importan tus invitados, aunque claro, a ti siempre te importó más las demás personas a tu propia familia — escupió

— Eso no es verdad, todo lo que he hecho ha sido para proteger a Magnus y a ti — dijo Asmodeo

— ¡NO! Si así fuera no habrías permitido que mi hermano estuviera con ese hombre, él destruyó mi vida — gritó

— Él no destruyó nada, cuando te calmes y le pidas perdón a tu hermano, hablaremos — le dijo en tono serio

— Como órdenes, padre — le dijo con rabia

Rafael salió del estudio y pudo observar a Magnus en la sala, vio a su sobrina y está se escondió detrás de su padre, Alexander seguía allí, los demás parecían haberse ido, su corazón se escogió al ver el miedo en Elara, subió las escaleras.

— Tal vez es hora de que nos vayamos — dijo  Magnus

— Yo los llevaré — dijo Alec y Magnus asintió, no creía poder conducir, desconocía a su hermano

La historia casi llega a 1k ahhhhhhhhhhhhh

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macabane36 💜 ¿sabés por qué estás aquí? Oh sí, nena, lo sabías, jajaja perdón si no te dije si o no cuando me preguntaste.

Se viene lo chido. 7w7 (si saben a lo que me refiero) 👉🏻👈🏻