XV. Familia Okami.

231 15 0
                                    


XV. Familia Okami.

Miércoles por la tarde, Kagome y Kouga fueron al cine como era su costumbre, pero ya de regreso Kouga le iba insistiendo a la chica para que se fuera con él a Okinawa. Iba a ser cumpleaños de su abuelo y no quería ir solo, después de todo, toda la familia Okami iba a ir y él no se llevaba particularmente bien con todos, las únicas excepciones eran sus primos Ginta y Hakaku.

― ¿Entonces vienes conmigo?― volvió a preguntar por decima vez en la noche.

― Solo será este fin de semana ¿Verdad?

― El viernes nos vamos y regresamos el domingo, lo prometo.― dijo al estacionarse afuera de donde Kagome vivía.

― Está bien.― contestó con una sincera sonrisa.

― Paso por ti a la escuela y de allí nos vamos. Mi madre se pondrá feliz de verte.

Por Kami, había olvidado que la madre de Kouga era algo así como una acosadora. Una señora loca por tener nietos, no la dejaría hasta que le prometiera darle nietos.

― No pongas esa cara. ― dijo divertido al ver la cara de horro de la chica.

― Tu madre no parará de acosarme.

― Yo te protegeré.― prometió.

― Eso espero, nos vemos el viernes.― dijo al bajar del coche y entrar a los departamentos.

Kagome y Kouga llegaron a un pequeño pueblo en Okinawa ya entrada la noche, eh inmediatamente fueron a la pequeña casa cerca de la playa, todo estaba muy tranquilo, casi no había luz en el camino, solo la que llegaba desde el pórtico. Entraron a la casa y no escucharon ruido, al parecer todos ya estaban dormidos, pero estaban equivocados.

― ¡Kagome-chan! Es un gusto verte de nuevo.― dijo eufórica una mujer de ojos azules y cabello negro corto.

― Igualmente.― saludo Kagome.

― A pasado mucho tiempo desde la última vez, pero mira lo bonita que te has puesto, no es que no lo fueras antes, pero ahora lo eres más.― decía la madre de Kouga.― Pero dime, ¿Tu y mi hijo al fin son pareja?― preguntó esperanzada al tomarla de las manos.

― ¿Cómo dice?.

― No me extrañaría, desde niños se llevaron bien.

― Mamá, Kagome solo es mi amiga.― interrumpió el moreno.

― Es una lástima, pero... Pronto podrían ser algo más ¿Verdad?― preguntó viendo a Kagome directamente a los ojos.

― Jun, ya deja que entren.― interrumpió un hombre robusto de ojos oscuros, Kouga era su viva imagen salvo por la diferencia de ojos.

― Hola señor.― saludo Kagome al padre de Kouga.

― Pasa y no le hagas caso a mi esposa, esta así porque quiere nietos.

― Quiero poder disfrutarlos y mi hijo no da señales de querer dármelos, es mi único hijo y no es nada complaciente con su madre.― se defendió Jun.

― ¡Kouga! ¡Ya llegaste!― gritó una chica pelirroja, provocando que la familia Okami se tensará al intuir que iban a tener una "escena".― ¿Quién es ella? ¿Por qué viene contigo?― preguntó al ver que todos trataban de manera muy familiar a la chica que había llegado con su "Kouga".

― Ayame cálmate...

― ¿Qué me calme? Pero si no te veo en mucho tiempo y llegas con esta chica.

Kagome observaba incomoda la escena, Kouga jamás le hablo de una chica pelirroja y al parecer ellos eran más que conocidos. Además se notaba que ella no le agradó desde que la vio, pero no podía culpar a alguien por tener celos.

VIENTRE DE ALQUILER Donde viven las historias. Descúbrelo ahora