Ashen weapon | Chanbaek

Capítulo 7

     Park Chanyeol detuvo sus caminata por las transitadas calles de Seúl. Fue una pausa un tanto abrupta que culminó con sus ojos centrados en la portada de un libro. En la imagen se mostraba una mano chorreante de sangre, la cual esperaba sostener una más pequeña. Su aliento se convirtió en vaho cuando entreabrió la boca para relamer sus labios resecos. La gente a su alrededor lo esquivaba y continuaba sus caminos con desinterés. Las luces y el bullicio de la ciudad permanecían con su ajetreo habitual, mientras que el alto se permitía quedarse de pie en la vereda.
    La luz amarilla de la librería lo llamó instándolo a ingresar. Si bien no era un aficionado de la literatura, disfrutaba de leer ejemplares de vez en cuando. Sin embargo, así intentara engañarse a sí mismo, sabía que el pequeño establecimiento llamó su atención por otra razón.
  
    Hace un par de días logró organizar un tiempo libre durante su horario de trabajo para dirigirse a aquella zona lejana. Ir a la instalación en la que el joven Byun residía era una tarea que, como mínimo, requería varios minutos.
    Después de escuchar la voz de Baekhyun por primera vez se sintió aturdido. Porque de nuevo, él no aparentaba ser alguien peligroso. Su tono de voz lírico, palabras pronunciadas con cuidado. Ojos índigo, rostro limpio y la brillante piel de sus pómulos alzados.

    El chico era hermoso, una mezcla de los seres del averno y los residentes del mismísimo cielo. No un punto medio, sino una mixtura del peligro y la inocencia.

   Y aquello era aterrador, porque ni siquiera sabía cómo reaccionar.

   Aún así, sus pies parecieron cobrar conciencia por sí mismos y terminó comprando el libro del escaparate. Conocía la historia, la había leído durante sus últimos años de escuela.
   La doctora Kim le había comentado que uno de los pasatiempos favoritos del peliplata era leer textos de distintas temáticas y materias. Baekhyun había recibido educación también, leyó en los informes que sus avances académicos fueron satisfactorios. Aún así, la educación superior parecía no ser una opción para el joven. Tampoco es que tuviera mucho sentido, no iba a necesitarlo para su futuro, pues su vida no le permitiría desempeñarlo como una persona normal.
    Por alguna razón, ver la portada de Macbeth en el estante le trajo un recuerdo fugaz del peliplata con la vista fija en un libro. Pudo haber asociado la imagen de Baekhyun a cualquier otra historia; sin embargo, parecía encajar demasiado con él. Los Macbeth eran un matrimonio que se dejó llevar por la codicia y terminaron cometiendo homicidios con tal de cumplir sus objetivos. La historia estaba basada en las crónicas de Holinshed y mostraba el proceso de decadencia de los protagonistas. Chanyeol se había sentido fascinado por el personaje determinado de Lady Macbeth.
  
    La cobertura delgada del libro se sentía lisa en sus manos. Él avanzó en la misma dirección que el viento helado de la noche.

                                 •••

–¿De nuevo por aquí?

    Kim Yongsun lo observó tras sus gafas con expresión desconfiada.
   Chanyeol había esperado que transcurrieran unos cuantos días más antes de dirigirse al lugar. Distrajo su mente en las reuniones, ordenó su apartamento y visitó a su madre con la excusa de llevarle un juguete a Toben. La espera fue larga para él; sin embargo, para la doctora no fue lo mismo. Al parecer su predecesor no tuvo como costumbre aparecer seguido por aquella zona. De tal forma Yongsun no se mostraría tan reacia ante él.
  
–Le prometí traerle un regalo –pronunció con seguridad fingida, la cual casi se derrumba cuando la mayor se mostró confundida.

    Si bien no le había prometido nada al peliplata, era una justificación creíble.

–¿Qué le trajiste?