Epílogo

399 31 4
                                    

 Abrí los ojos para encontrarme con dos mujeres hermosas y encantadoras en mi cama.

 ¿Qué? ¿Creian que mi relación con Amber duraria toda la vida? Neh, nos divorciamos meses después que naciera mi hija.

Es broma, no dejaria a esta mujer por nada del mundo, pero sí que me levanté con dos mujeres. Mi bella esposa y mi hermosa bebé de once meses. Me quedé mirandolas hasta que dos hermosos ojitos grises se abrieron y me miraron, le sonreí y me levanté con cuidado para no despertar a Amber y tomé a Skyla en mis brazos.

 Ya fuera del cuarto besé sus regordetas mejillas y ella puso sus manitas en las mias y acercó su nariz a la mia, su saludo. La llevé abajjo y le preparé su biberon. Normalmente Amber era que hacía esto , pero ella había pasado la mayor parte de la noche acunando a Skyla , porque en mi hermosa sufria de sus enciitas. Por más que luché para que durmiera un rato y que yo me quedaba con Skyla, se negó asi que nos quedamos los dos despiertos.

 Amber hizos sus aparición en el cuarto de juego de Skyla cuando jugabamos a derribar bloques, su juego favorito.

—¿Porqué no me despertaste?—me preguntó con voz zonñolienta.

 Miré su cuerpo vestido con pantalones pijamas tan largos que rozaban el piso y una de mis camisas, tenia el pelo suelto y revuelto, dandole un aspecto sexy y descalza. Sentí como mi cuerpo y...otra parte de mi volvia a la vida.

 Después de tres años seguia deseando a mi esposa como el primer día.

—Imaginé que estarias cansada y pensé en dejarte dormir un poco más.

 Skyla caminaba insegura al encuentro de su mami. Amber se arrodilló para que nuestra hija entrara en sus brazos y la abrazó y besó su cabecita.

—Puedo llamar a Dayron y decirle que no voy a entrenar hoy.

 —No, es mejor que vayas, se va a enojar si sigues faltando.

 —Él sabe lo que pasa con ella, si le digo que tú necesitas dormir entenderá.

 Amber se dejó caer para apoyar la espalda en el piso llevándose a Skyla con ella. Para no tener hijos y asegurar que nunca los tendrá, Dayron era bastante cariñoso con y paciente con Skyla.

—No te preocupes por nosotras, estaremos bien. Karen viene después de la universidad.

 —Bien, pero si me necesitas, llama. ¿Está bien?

 Asintió.

 Subí corriendo las escaleras para cambiarme, abajo Amber le hacia cosquillas a Skyla.

—Ya me voy, las amo.

 —Tambien te amo.

 Me agaché para besar a Skyla en la frente.

—Te amo—le dije a Skyla.

 —Tamo—me dijo poniendo sus manitos en mi cara otra vez, le sonreí.

 —Te amo nena, estaré de vuelta a la hora de la comida.—besé a mi esposa en la boca.

 —Tambien te amo.

 Sin estar conforme, levanté a Skyla del suelo y la abracé, ella puso su cabecita en mi hombro y movió sus piecitos con ese movimiento que hacen los bebés. La besé y se la entregué a su mamá, si iba a entrenar, tenia que llega temprano para que Dayron no pateara mi trasero , volví a besar a mi esposo y salí corriendo de la casa.

 Si alguien me hubiera duco cuatro años atrás que hoy en día estaria casado y con unahija, me hubiera reido en su cara y dicho que estaba loco. Pero ahora no podia imaginar una vida sin esas dos mujeres, lo tenia todo si estaban conmigo y lo que no, no hacia falta.

 Amber era una mujer especial, ella insistió en ponerle Skyla a nuestra bebé en memoia de mi gemela. No hay nada en este mundo que no consiga para ella. Lo que quiera, lo tiene, en realidad lo que mis dos mujeres quieran, lo obtienen.

 Siempre.

Bumps and loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora