awaken.

Trece

JeongHan era un manojo de nervios, ya habían pasado tres días en los que había confesado todo, y no era como lo imaginaba, sentía que en cualquier momento WonWoo iba a entrar en su departamento —más bien el suyo y de JiHoon, porque desde que trabajaban juntos vivía con él—, y lo tomaba de la camisa y lo golpeaba una y otra vez por arruinar su felicidad, pero en su defensa, para JeongHan no era razonable lo que WonWoo hacía para superar la muerte de Peter, necesitaba ir a un psicólogo.

—¿Qué hiciste? —dijo JiHoon entrando en la habitación de JeongHan con los ojos llenos de lágrimas y sosteniendo su celular apenas—. Llamé a SeungCheol...y dijo que no quiere saber nada de mí, y que desaparezca junto a WonWoo.

JeongHan se levantó de su cama preocupado, no había pensado en ese pequeño detalle, en donde su amigo y Seungacheol estaban empezando a salir románticamente. A JiHoon le comenzó a temblar el mentón junto con su labio inferior y se echó a llorar en el pecho de JeongHan, sin poder retener nada.

—Lo...lo siento JiHoon —murmuró JeongHan rodeando a Jihoon con sus brazos.

—¿Le dijiste la verdad a SeungKwan, cierto? —dijo JiHoon entre sollozos, mirándolo.

—Se lo conté a sus amigos, ellos iban a enterarse de igual manera porque estaban en el cementerio el otro día. Si pasaba más tiempo... sería peor JiHoon, y lamento mucho que por culpa de WonWoo ahora estés sufriendo, sé que sí se lo explicas bien a SeungCheol, y le dices que no sabías de SeungKwan, quizás vuelva...

—¿Crees que no lo intenté? —dijo JiHoon volviendo a llorar como un niño pequeño.

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E

ran pasadas las una de tarde en casa de SeungKwan, y él seguía en su cama, cubierto hasta su cabeza por las sábanas, quería desaparecer para siempre. Su madre entró en su habitación preocupada, su hijo no era de quedarse tanto tiempo durmiendo, la mayoría del tiempo solía estar levantado a las 9:30.

—¿Hijo estás bien? Debes tomar tus pastillas y comer algo —dijo la madre de SeungKwan sentándose en su cama.

SeungKwan se quitó las sábanas de encima, y se incorporó en la cama evitando la mirada de su madre, pero las madres tienen un sexto sentido y saben cuando algo anda mal, o la mayoría lo sabe.

—¿Por qué tus ojos están hinchados? ¿Has estado llorando? —dijo la madre pasando sus manos por el rostro de su hijo con preocupación.

—Mamá... ¿puedo quedarme todo el día aquí? Solo por hoy —pidió SeungKwan y su madre se asustó por ello.

—Si hay algo que te esté pasando, dímelo por favor —dijo la mujer atrapando la mano de SeungKwan entre las suyas, pero el chico hizo una mueca triste.

—No quiero hablar de eso mamá...

La madre de SeungKwan no quiso indagar más, ella y su hijo eran muy unidos puesto que solo eran ellos dos contra el mundo, por lo que sabía que si SeungKwan no quería hablar de ello era porque le dolía demasiado, y ella no quería hacerlo sentir peor.

Después de dos horas el celular de SeungKwan comenzó a vibrar en el suelo por quinta vez, al lado de la cama, el chico que ahora tenía el cabello dos centímetros de largo soltó un gruñido, no quería hablar con nadie ese día.

—¿Hola? —contestó SeungKwan sin ver el contacto de la llamada.

—¿Kwannie? ¿Estás bien? Te llamé varias veces... —era su voz, lo que más le gustaba era lo que más le desagradaba ahora.

—Eres un mentiroso —dijo SeungKwan al celular sentándose en la cama.— No quiero hablar contigo, no vuelvas a llamar nunca más.

—Kwannie... —WonWoo suspiró sabiendo que de alguna manera forma SeungKwan ya se había enterado de todo—. No sé cuanto sabes pero déjame explicarte, conversemos esto por favor.

SeungKwan se lo pensó unos segundos, si quería explicaciones pero no quería salir más dañado de lo que ya estaba, quería ver a WonWoo y golpearlo pero lo quería demasiado, y se sentía más que avergonzado de si mismo porque una parte de él no quería creer que el estuviera pasando eso a él, quería despertar aún cuando ya lo estaba.

Media hora y un poco más pasó desde la llamada de WonWoo, SeungKwan salió de su casa y se quedó esperándolo afuera, sentado en la acera de la calle con su mentón en las rodillas, mientras abrazaba sus piernas y hacía ejercicios de respiración para dejar de llorar.

—Hola... —dijo WonWoo, habló con suavidad intentando averiguar el estado de ánimo de SeungKwan.

—¿Quieres explicarme todo esto? —espetó SeungKwan con más furia de la que pretendía mirándolo hacia arriba, WonWoo retrocedió un paso—. Me has estado usando...

—Kwannie eso no es así —explicó moviendo las manos, SeungKwan se levantó del suelo y lo miró a los ojos.

—¿Qué es lo que pasaba contigo? Me mentiste todo este tiempo, tú, SoonYoung, SeokMin... —dijo SeungKwan con su labio inferior temblando, WonWoo se sintió la peor persona sobre la faz de la tierra—. Jugaste conmigo y con mis sentimientos...

—Yo de verdad lo siento mucho, mi intención no era hacerte daño —dijo WonWoo dando un paso adelante pero SeungKwan retrocedió poniendo sus manos frente su pecho.

—Pero lo has hecho... —SeungKwan cerró sus ojos con fuerzas y al abrirlos lágrimas gruesas resbalaron por sus pálidas mejillas—. Eres la primera persona a la que le digo mis sentimientos... ¿Qué pretendías? ¿Tenerme siempre engañado? ¿Haciéndome creer que te gustaba por quién soy y no porque tengo el rostro de tu ex novio?

WonWoo no supo que decir, jamás creyó que podría lastimar tanto a una persona solo por ser egoísta y pensar solo en él y en su pena, no pensó en lo que SeungKwan sentiría, y sus amigos se lo habían advertido tantas veces pero no quiso escuchar, no quiso ver nada de lo que podría ocurrir, y allí estaba el resultado, un chico inocente llorando a mares por su culpa.

—¿Sabes lo que más me duele? Es que yo si estoy enamorado de ti y todo lo que dije es verdad pero tú solo estás aquí porque no quieres perder lo único que queda de tu ex... dijo SeungKwan con sus ojos enrojecidos limpiando torpemente su rostro.

—SeungKwan escúchame —WonWoo lo tomó por los hombros—. Está bien, lo acepto, hice todo esto mal... Pero sobre el otro día, cuando nos besamos, y dije que también me gustabas no mentía.

—¿Cómo quieres que te crea? Si me has mentido por dos meses, cada día, cada momento juntos fuera una farsa, todo inventado para que me quedara a tu lado —habló SeungKwan elevando la voz.

—Por favor SeungKwan, perdóname —pidió WonWoo poniendo su mano en puño sobre su boca, desesperado, nuevamente estaba perdiendo a alguien que de verdad amaba.

—No quiero volver a verte, no llames ni envíes mensajes, no le pidas a SoonYoung ni a SeokMin que lo hagan tampoco... Jamás pensé que fueras de esta manera, solo piensas en ti y en tu propio beneficio —dijo SeungKwan con la voz entrecortada por los sollozos.

SeungKwan se dio la vuelta, y ese simple acto fue lo que más le había costado hacer en toda su vida, dejar atrás a la primera persona que había amado, y que tanto daño le estaba causando irónicamente.

WonWoo se cubrió el rostro mientras veía que la puerta de la casa de SeungKwan se cerraba, y derramó todas las lágrimas que contuvo al ver llorar a SeungKwan, y lloró por SoonYoung y SeokMin, porque ellos no tenían ninguna culpa sino que era de él por arrastrarlos a conocer a SeungKwan, y luego lloró por JiHoon a quien había tratado mal solo porque le había dado consejos que ahora se arrepentía de no haber tomado, y lloró por JeongHan también, porque sabía que era el más afectado y lo había dejado solo, rompiendo toda promesa que alguna vez le hizo diciendo que siempre estaría para él.

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