Prólogo

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Semanas después...

Boo SeungKwan estaba sentado en su manta gris puesta encima del césped del parque cerca a su casa. Tenía sus manos apoyadas detrás de él, las piernas estiradas, y de vez en cuando movía sus zapatillas celestes de buen humor.

—¿Qué haces? —preguntó WonWoo en su oído, sobresaltando al chico que ahora poseía un bonito corte de cabello que le llegaba a las orejas.

WonWo se sentó a su lado sonriendo, le gustaba la ropa alegre de SeungKwan sobretodo su suéter anaranjado, pero más le gustaba verlo así de tranquilo, con esos ojos brillantes y sus pequeños pies moviéndose de un lado al otro contentos.

—Me asustaste... —se quejó SeungKwan abrazándose a sí mismo, y soltando una risita nerviosa—. Solo estoy viendo a los chicos, se están divirtiendo.

SeokMin y SeungCheol parecían estar haciendo una competencia de quien sacaba más y mejores fotos, ya que ambos estaban con sus cámaras apuntando a todo lo que les parecía bonito, y para SeungCheol lo más bonito era JiHoon, quien estaba junto a SoonYoung mirando un nido en donde habían pequeños polluelos, ambos chicos estaban muriendo de ternura por ellos. JiSoo y JeongHan estaban en su propio mundo compartiendo audífonos, el menor parecía estar explicando algunas cosas mientras que el otro movía la cabeza en señal de que estaba entendiendo, y a veces soltaban carcajadas ya que JeongHan quedaba un poco confundido.

—¿Verdad? Me gusta ver que se lleven bien entre ellos —dijo WonWoo con alegría, pegando apropósito su pierna con la del otro chico.

—¿Cómo va JeongHan? —preguntó SeungKwan observando el contraste entre el jean negro del chico de cabello gris y el jean claro que el mismo estaba usando.

Hace unas semanas atrás JeongHan solo se alejaba de su grupo de amigos y estaba hundiéndose a sí mismo sin ser capaz de pedir ayuda por vergüenza. Pero en las últimas dos semanas compartía con todos y era bastante gracioso y cariñosos con los demás chicos, sobretodo con Joshua, con quien había conectado ya que Joshua estaba estudiando producción como lo que JeongHan quería hacer el próximo año.

—Sus terapias van muy bien, si sigue así no hay necesidad de internarlo o algo. Todos estamos muy orgullosos de él, y de lo fuerte que ha sido en todo el proceso de abstinencia —contó WonWoo, y SeungKwan sonrió con ternura ya que el chico a su lado, ha sido el que más pendiente había estado de JeongHan el último tiempo temiendo que lo internaran.

—Me alegro por él, salir de una adicción no debe ser fácil pero él lucha por ello, y lo hace por todos ustedes, eso demuestra lo mucho que los aprecia —dijo SeungKwan viendo cono Joshua abrazaba a JeongHan por los hombros.

—Es un chico fuerte... —murmuró WonWoo viéndolo también.

Luego sus ojos fueron al rostro de SeungKwan, era idéntico al de Peter pero al mismo tiempo no se parecía en nada, la forma en que sonreía o en la que arrugaba la nariz era completamente diferente. WonWoo a veces lo relacionaba a quienes tienen hermanos gemelos, suelen ser iguales físicamente pero cada uno tiene su propia personalidad, y SeungKwan era un mundo nuevo que descubrir, cada vez podía encontrar algo inédito como los diferentes tonos que podía llegar a alcanzar con su voz o los datos interesantes que nadie sabía SeungKwan se los contaba.

—¿Por qué me quedas viendo? —preguntó SeungKwan sonriendo, y WonWoo se dio cuenta de que lo estaba mirando fijamente notando que aquello provocaba que las mejillas del chico se pusieran rosadas.

—Te ves lindo sonrojado... —murmuró WonWoo y SeungKwan por inercia tocó sus mejillas.

—No me molestes... —habló SeungKwan desviando la mirada.

Desde que SeungKwan se había desmayado en su casa, había pasado casi una semana en el hospital para que volviera al sistema original de sus medicamentos y que su cuerpo no rechazara el trasplante de rostro como lo estaba haciendo. Y cuando le dieron el alta las cosas entre WonWoo y él seguían siendo complicadas.

SeungKwan estaba muy seguro de sus sentimientos pero seguía creyendo en que WonWoo le seguía mintiendo acerca de los suyos, por eso había intentado alejarse y no pasar tiempo con él para intentar olvidarlo pero le era imposible, estaba enamorado de WonWoo y de su amor por los gatos y por la música, de como estaba siempre a su lado cuidándolo y contándole al oído, y como también se reía de sus chistes malos o el simple hecho de que al verlo se sentía más ligero. Por lo que finalmente había terminado perdonándolo porque a pesar de todo si había una parte de él en la que sentía que WonWoo no lo trataba como Peter, sino como SeungKwan, el chico que iba a la universidad con muchos lápices de colores, que tenía un ukelele en casa y que amaba el color azul.

—SeungKwan... —llamó WonWoo, y SeungKwan se giró sonriendo ya que estaba viendo como JeongHan y Joshua reían sin control por algo que había dicho el mayor.

—¿Qué pasa?

—¿Sigues sintiendo lo mismo por mi? —preguntó WonWoo tomando la mano de SeungKwan entre las suyas y acercándose un poco más, poniendo su rodilla encima de la del otro chico.

—¿A qué te refieres? —murmuró SeungKwan entrelazando su mano con la del otro chico, notando que encajaban a la perfección.

—Me refiero a que si estarías dispuesto a darme una oportunidad, sé que de primeras llegué a ti por razones equivocadas, pero luego descubrí un mundo nuevo y demasiado intrigante en ti, y no tardé demasiado en quedarme embobado contigo, sobre todo porque adoro tu voz, y otras partes de ti —susurró WonWoo lo último poniendo una mano en la pierna de SeungKwan, este sonrió negando con la cabeza.

—No... —habló SeungKwan y WonWoo lo miró asustado—. Mis sentimientos por ti no han cambiado ni un poco— el de cabello gris puso su mano en el pecho aliviado.

—Entonces, Boo SeungKwan, ¿Serías mi novio?

—¿Y si salgo herido otra vez? —preguntó SeungKwan mirándolo directo a los ojos inquieto.

—Prometo que eso jamás pasará de nuevo, voy a protegerte incluso si es de mi mismo —dijo WonWoo, y SeungKwan sonrió.

—Creo que ya sabes mi respuesta... —musitó SeungKwan, y WonWoo tuvo miedo de sonreír—. Si quiero ser tu novio, pero con una condición.

—¿Qué es? —preguntó WonWoo sonriendo emocionado.

—Si algo me pasa, puedes quedarte con mi ukelele... —dijo SeungKwan como si fuera lo más serio del mundo y luego soltó una carcajada haciendo que WonWoo pusiera los ojos en blanco.

—Ven acá... —dijo WonWoo tirando del suéter de SeungKwan y estampando sus labios en los del chico, degustando el sabor de las donas azules.

WonWoo tomó las piernas del chico y la puso encima de las suyas, dejando una de sus manos en los muslos de SeungKwan, mientras que este sonreía en medio del beso por el acto y sostenía las suaves mejillas de WonWoo entre sus manos.

—Te amo, Jeon WonWoo —susurró SeungKwan separándose un poco y acariciando el rostro de su novio con cariño.

—Yo te amo muchísimo más, Boo SeungKwan —musitó WonWoo, antes de volver a atacar los labios del otro chico, que tanto había extrañado desde esa vez en su habitación.

SeungKwan pensó que después de todo el accidente había traído algo bueno al menos, y era aquel chico de cabello gris, a quien estaba besando en una manta gris y que era exclusivamente para él. Y que sin importar como llegó, se había quedado por él, por quien era.

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