Desperté, por el sonido de la alarma. Esta última semana, he estado recordando muchas cosas, y aprendiendo muchas otras más. Kido, (que es así como lo he decicido llamar) se ha convertido en mi mejor amigo. Aunque me lleve la contraria todo el tiempo, se le quiere.
En cuanto a Amity... no la he vuelto a sentir. Es raro, porque te acostumbras en muy poco tiempo a sentir lo mismo que pasa por la piel del otro.
>> No te preocupes Luz, ya vendrá. Te lo aseguro. Y siento darte esta noticia, pero, tu primer celo está próximo.
– Oh no. No quiero volver a esa calentura rara, no me gusta para nada.
>> No puedo hacer nada, y no hay supresores por aquí.
– ¿Supresores?
>> Son unas pastillas que se suelen consumir en el celo, que hacen que tu deseo sexual disminuya hasta casi niveles normales.
– Quiero. Una. Caja. Ya.
>> Lo siento, pero no se donde hay. Hace años que no veo uno.
– Nah, ya veré que hago. Pero ahora, tengo que unirme a la reunión semanal.– Wow, ya había pasado una semana desde mi celo por lazo forzado.
Y llegué a la sala de reuniones, que en ese momento estaba totalmente sola. Para ambientar las reuniones, siempre me gustaba poner velitas por la habitación. Olor a lavanda, por supuesto.
También me gustaba poner bebidas a todos, me sabía sus favoritos. Empecé por el de Willow:
Como ella, un mar de contradicciones al cual, posiblemente, le tenga un pelín de miedo. Ella es como las rosas, delicada pero puntiaguda, y por eso le puse una grandiosa, alabada y gran conocida coca-cola. A mi personalmente no me gusta, porque el gas en mi esófago no es muy bonito de sentir.
El siguiente, la de Gus:
Con él no me complicaba, no bebía nada que no fuese agua con gas. Y hablando de él, creo que no había mejor jefe de enfermería que él. Él lideraba toda la sección de curanderos, y no mentiría si dijese que me ha salvado de la muerte varias veces. Recuerdo como lo conocí, estaba muy borracho en una esquina. Por lo tanto lo llevé aquí y me dijo que era un reconocido doctor, pero, que le habían condenado a homicidio por defender a su perro de un maltratador ya que se le fue la mano con el agresor y lo mató. Le hice un pasaporte falso y nueva documentación, le di la opción de irse, pero se ofreció a quedarse aquí, con su perro. Lleva dos años sin tomar alcohol.
Luego iba Skara:
Ella era de las más jóvenes de todos, con solo dieciocho años, estaba al cargo de toda la comunicación del clan. Ella llevaba las redes y los tratos con todos los proveedores. Me sorprendió su potencial y como llegó aquí. Skara venía de una familia muy pobre, se metió en mi casa con intención de robar, pero la pillaron en menos de diez minutos. Me contó su historia y conmovida, la dejé quedarse trabajando para mi. En la primera semana mostró la gran habilidad en negocios e informática para su edad. Con tan solo quince años, estaba sacando a su familia adelante, aunque sé que tuvo problemas debido a su trabajo, ahora todo iba bien para ellos. A ella le puse su querido y amado zumo de manzana.
>> En este punto, ¿qué tipo de mafiosa le pone bebidas a sus trabajadores en una reunión? Esto no es lo que suelo leer.
– Simplemente me gusta tratar bien a la gente que es buena conmigo. Y no es nada raro querer ponerle su bebida favorita a alguien siempre que tenga una reunión conmigo. Es ser amable.
>> Luz, querida. Eso es raro. No conozco a nadie que haga eso.
– Pues yo no les veo quejarse de nada, de hecho, están más felices así. Y yo velo por su felicidad.
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Undercover [Lumity] [Mafia + Omegaverse AU]
Fiksi UmumEn el mundo bajo, donde todos los despreciables de la sociedad están, Luz tiene su negocio. Todo ha ido bien, hasta que un extraño dolor la abarca y comienza a recordar muchas cosas. Y también recordó a Amity. Todo, todo de ella. Su sonrisa, sus ojo...