"Cuando vio sus ojos negros, sus labios indecisos entre una sonrisa y el silencio, entendió la parte más importante y más sabia del lenguaje que todo el mundo hablaba y que todas las personas de la tierra eran capaces de entender en sus corazones. Y esto se llamaba amor, algo más antiguo que los hombres y que el propio desierto, y que sin embargo resurgía siempre con la misma fuerza doquiera que dos pares de ojos se cruzaran como se cruzaron los de ellos delante del pozo."