SECRETO A VOCESLilah
Atónita seguía viendo la pantalla con el mensaje que me había llegado hace unos minutos, no me podía creer que ese mensaje fuera real, por muchos meses anteriores esperé que llegara y nunca pasó, pero bien decían que las cosas llegan cuando menos las esperas.
«¿Podemos vernos?»
Seguía creyendo que podía manejarlo pero no era así. Un grito me sobresalto haciendo que casi tirara mi móvil.
Syna.
—Como vuelvas a hacer eso, Syna Caputo. ¡Casi me das un infarto!
Se carcajeó fuerte sentándose a mi lado. Alzo la cabeza queriendo ver con quien hablaba, mi quería amiga siempre queriendo saber con quien hablo.
—¿Se te perdió algo?—dije retirando el móvil de su vista.
Se volvió a verme entrecerrando lo ojos
—Algo ocultas, mujer, y a mi no me vas a engañar.
Me hice a oídos sordos y desvié el tema.
—Adonis me llamo anoche, dijo que quiere invitarme a cenar.
Alzó las cejas
—¿En serio?
—No.
Arrugo las cejas confundida
—¿eh?
—Que si tonta, te lo cuento por una razón. Duh.
—Bueno, yo quisiera contarte algo—volteé a verla dándole a entender que siguiera hablando—ahora que sacas el tema de Adonis, tienes que saber que en mi viaje a nueva yo...
En ese momento mi móvil sonó y alce una mano para que esperara. Era un número desconocido.
—¿Si?
—No respondiste mi mensaje
Maldita. Sea.
—¿Que? ¡Ah si! La entrega del tapete claro, ehm bueno, creo que no podré recibirlo.
—¿Que? ¿De que hablas? ¿Cual tapete?
—Si, si bueno, recibí el mensaje es solo que no me lo esperaba de hecho creí haber cancelado ese pedido hace muchísimo tiempo.
—¿Me estas jodiendo, Lilah?
—¡No! Para nada, es solo que ya no quiero el tapete, tampoco me apetece reunirme con el encargado, solo, cancélelo, luego tramitaré la devolución.
—No entiendo nada...
¡Estupido!
Syna perdió interés en mi llamada y dije bajito que iría por unas papas. Cuando la vi alejarse pude respirar en paz.
—Evan, no, no y rotundamente no. No saldré contigo, no quiero verte, ni escucharte cuando eso pudo pasar tu ¿que hiciste? Ah si, te largaste, maldito idiota, no me jodas más, ¿por que carajos tiene mi numero? Ah si claro, tú noviecita, jodete, imbecil.
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No te pido amor
Teen FictionLilah Piamonte, era una joven decepcionada de sus aventuras amorosas, la última la había dejado destrozada, pero había encontrado remedio a su corazón en Bastiaan, su actual novio. Su vida era plenamente relajada, aprendía a sobrellevar el dolor ocu...