UNO ✨

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💌12 de abril, 1999

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💌12 de abril, 1999. 💌


¿Por qué se supone que debo ir a la dirección? Nunca cometí ningún delito.

Estaba siendo literalmente arrastrado hacia el lugar más estúpido de toda la escuela; la dirección.

— Cierra la puerta. — Ordenó la voz del director.

El profesor Shimura obedeció.

— ¿Qué ha pasado? — Preguntó el viejo molesto.

— Hemos tenido más problemas con él, pero ahora respecto a su enfermedad.

Giré los ojos molesto, estaba harto de que cada vez me mandarán a la dirección por cosas aún más estúpidas.

No podemos permitir que infecte a nuestros alumnos, debemos tomar cartas en el asunto cuánto antes.

Ésos dos viejos arrugados estaban locos, locos por completo. ¿Realmente estaban hablando en serio?

— Estuvo hablándoles a todos sobre su condición, puede que le meta ideas locas en la cabeza y dentro de poco tengamos a todos los padres de familia enfadados aquí. — Dijo Shimura. — ¡No hace falta mencionar que su comportamiento es inaceptable!

Solo los observaba con una expresión de burla, en cualquier momento podía golpearlos sin tener que usar toda mi fuerza pero ésta vez no me lo perdonarían.

— ¡Debemos enviarlo a una escuela religiosa cuánto antes! — Seguía insistiendo el viejo con una gran cicatriz.

— Hablaremos a sus padres de inmediato, es una amenaza para el instituto y para toda la sociedad, definitivamente.

Mientras ambos viejos arrugados debatían sobre mi futuro la puerta de la oficina se abrió.

Ambos voltearon a ver de quién se trataba y unos segundos después volteé también.

— ¿Sobre qué discuten? Hacen demasiado ruido, llegan a ser molestosos incluso estando allá afuera todo todo se escucha. — Regañó el hombre que recién entró.

No es que llevara tanto tiempo dentro de la escuela, pero nunca había visto a ése hombre, o quizá siempre estuvo pero no presto atención a ése tipo de cosas.

De cualquier forma, se veía como uno de los tantos maestros amargados de aquí.

Por la forma en la que le habló al director, cualquiera podría temerle.

Era un tipo bastante alto, cabello marrón y ojos verdes. Llevaba consigo un libro, para ser exacto, uno de filosofía. Tenía el cabello amarrado en una coleta baja, tenía puestos unos lentes y sus ojos se veían bastante cansados, su voz era algo gruesa, tenía puesto uno pantalón café claro y un abrigo del mismo color.

30 sitios para dar besos cálidos - [KakuHidan] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora