GREEN EYED

30

-Tanto tiempo!- 

Megan había ido a visitar a sus padres luego de meses sin verlos.

Su madre y su padre la recibían con amplias sonrisas en sus caras.

Vivían a unos veinte minutos de la ciudad, en una antigua casa de campo.

-Hija mía, te extrañaba un montón.- dijo su padre abrazándola.

Megan estaba feliz de verlos pero al mismo tiempo se sentía extraña. Venía con el propósito de contarles que era bisexual. De hecho, estaba aterrada. Sabía que era muy probable que no se lo tomaran bien, pero luego de poder descubrir su sexualidad con Ellie se sintió lista para decirles.

Se sentaron a almorzar, ella junto a su padre y su hermano menor, que tenía trece años.

-Gabe, ven aquí.- dijo Megan señalándole la silla que estaba a su lado. 

El pequeño hizo tal como su hermana le pedía, sentándose a su lado y abrazándola.

-Joder, si estás cariñoso ahora eh?- dijo Megan riendo.

-Cariño. Lenguaje.- dijo su padre.

-Les aseguro que este demonio dice cosas peores.- dijo refiriéndose a Gabriel, quien la miró intentando señalarle que se callara.

Su madre salió de la cocina con los platos, poniéndole uno a cada uno.

"El último almuerzo antes del caos." pensó Megan.

Intentó disfrutar aquel último momento de paz con su familia al máximo. Sabía que después de contarles acerca de su sexualidad nada volvería a ser igual. No sabía si le dejarían de hablar o simplemente la mirarían raro. Pero estaba asustada.

Ayudó a recoger los platos una vez terminaron el almuerzo. Todos se sentaron mirándola, esperando a que contara sobre su vida o como le había ido en este tiempo.

Comenzó a contarles sobre sus vacaciones y el trabajo. Su hermano, algo aburrido por los temas, quiso levantarse e irse pero Megan le impidió hacerlo.

-Gabe, quédate un momento porfavor.- le dijo.

Era la hora de decirles.

-Mamá, Papá, Gabe. Puedo contarles algo?- dijo Megan luego de dar un gran suspiro.

Sus padres asintieron.

-Yo... he tenido un largo tiempo para explorarme a mí misma y descubrir mejor quien soy. Vivir sola me ha dado grandes oportunidades para poder conocerme. En este proceso he descubierto muchas cosas pero hay una en particular que me parece importante que sepan.- dijo algo temblorosa.

-Quiero contarles que soy bisexual. Me ha costado aceptarlo pero ya no tengo ninguna duda de que esto es lo que soy. Espero... espero que me acepten.- continuó.

Sus papás la miraron atónitos.

-Gabriel ve a tu cuarto ahora.- dijo su padre.

-Pero qué hice?- dijo Gabe confundido. Su padre insistió con la mirada, por lo que el niño le hizo caso.