❒ | 𝐌𝐢 𝐡𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐚𝐬𝐭𝐫𝐨 𝐩𝐞𝐫𝐯𝐞𝐫𝐭𝐢𝐝𝐨. [Mikellino]

Epílogo

- Papá, ¿falta mucho?

Tro: No, ya casi llegamos. *dijo fijando su mirada al frente, mientras sostenía el volante* y deja de preguntar lo mismo cada cinco minutos.

- Lo sé, pero ya quiero llegar a casa. *sonrió emocionada acariciando al pequeño perrito de pelaje negro que tenía sobre su regazo* y que Papá Mike conozca a Willyperro!

Tro: ¿En serio le pusiste ese nombre?

- Sí! Mis tíos me dijeron que Papá Mike tenía su youtuber favorito que se llamaba Willyrex y combine ese nombre para ponérselo a mi primera mascotita!

Tr: Ya veo..*sonrió*

Pasaron unos minutos, el azabache aparco el auto, salió y ayudo a su hija a bajar con su mascota en brazos. Ambos se dirigieron a un jardín.

Todos los fines de semana, visitaban a Mike. Le traían flores, Mikaela siempre le contaba las travesuras que hacia, como fácilmente se enojaba su padre. Como le iba en el colegio, con sus abuelos, sus tíos y tías. Y en esta ocasión, su nueva mascota. 

- Hola papá, soy yo tu hija Mikaela. *sonrió mirando la tumba* quise venir a presentarte a.... *alzo al perrito y lo elevo* ¡Willyperro! tuve que estar insistiéndole a papá Trollino durante dos semanas para que adoptemos un perrito.  

La mascota solo movió la colita y en forma de saludo respondió un "guau".

_ Oh! Que bonito es Mikaela, me gusta como se llama_ 

Tr: Si, tuve que aceptar o no me dejaba en paz. *suspiro*

_Ay amor, sabes que Mikaela es muy insistente cuando quiere mucho algo, en eso se parece a mi  jajaja _ 

Continuaron hablando sin saber que de verdad Mike estaba junto a ellos, les escuchaba, pero ellos no a el, hasta que tuvieron que despedirse. Estaban acercándose al auto, cuando sintieron una fuerte brisa, era muy relajante y familiar. Querían creer que era la despedida de Mike. 

_ Adiós. Cuídense y recuerden que los amo_ 

- ¡Adiós papá Mike! te quiero. Nos vemos la otra semana. 

Tr: Nos vemos, amor. 

⌜♡⌟

Retomando;

Habían pasado siete años desde la muerte de Mike.

Cuando falleció, su cuerpo fue enterrado en un jardín que pertenencia a la Familia de Rosa, allí se encontraban todos sus familiares que pasaron a mejor vida. El jardín siempre estaba cuidado.

Desde ese entonces, todos estaban devastados. En especial Trollino, estaba muy deprimido. No salía de su habitación muy seguido, si lo hacía era para ir a ver a su hija al hospital o ir al ese jardín, comía muy poco y no quería ver a nadie más.

Durante dos semanas, los demás no sabían que hacer. Hasta que les informaron que la bebé ya podía ir a casa.

Todos decoraron la entrada y prepararon una pequeña celebración. Para cuando llegará Trollino con ella, así le animarían un poco.

El plan funcionó, Trollino no pudo evitar sonreír al ver a todos con un cartel en la entrada.

"¡Bienvenida a casa Mikaela!"

Desde allí, las cosas mejoraron, Trollino se quedó con su hija en casa de los chicos, siempre venían seguido a visitarlos Rosa con Darío y las chicas.

El azabache, se enfocó en cuidar a Mikaela y terminar sus estudios. Al inicio fue muy difícil, la bebé requería mucha atención, pero con ayuda de los chicos, quienes se turnaban en el día o en la noche para cuidarla, pudieron salir adelante.