Encuentro Humedo

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El calor en esta noche es insoportable la verdad. Quiero tomar una ducha fría para mitigarlo; además, tu cumpleaños se acerca y te prometí anticiparte algo y, que mejor que tomando una ducha para inspirarme.
Tu recuerdo viene a mí.
Me desvisto, entro a la regadera, el agua fría cae de golpe en mi cabeza, de ahí lentamente recorre mi cara, baja por mi cuello, y me refresca como si estuviera teniendo un momento intimo
Tu recuerdo llega a mi más fuerte.
Disfruto esta ducha, así como tu imagen; cierro los ojos y evoco tú mirada, tu sonrisa, mientras me veo frente a ti, mordiéndome los labios y no aguantándome las ganas de besarte y probar todo lo que hay en ti y lo que exista en ti. Enjabono mis manos con gel aromatizado en jazmines, rosas y musk, restriego la borla con jabón en mi espalda, mi abdomen. Tú, sigues en mí.
El agua es más tibia al tacto en mi piel, mis ojos se entreabren para hacer más firme tu imagen y que no se me borre de mi imaginación y menos de mis fantasías.
Que ya no lo es, porque realmente estás aquí, percibiste mi sentir y has llegado…
Estás frente a mí, desnuda y con esa sonrisa tuya que me desarma completamente… Es tan delicioso tenerte aquí conmigo y solamente tengo muchos deseos de devorarse y besarte con cautela y que el secreto y la lujuria sean los protagonistas de nuestro encuentro.
 

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