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Al ver como el joven alemán se iba del brazo de otro hombre Hendery sintió una ligera punzada en su corazón, algo estaba mal.

“¿Estoy siendo sobreprotector?” pensó.

Volteó a ver a su mejor amigo que intentaba quitarse de encima a una chica, estaba algo sonrojado y no dejaba de sonreír, era más que obvio que disfrutaba de tener mucha atención, por primera vez desde que conocía a Xiaojun se sintió asqueado al verlo, se fue de allí.

Se dirigió a donde habían unas personas bebiendo y les pidió una cerveza, había tantas cosas en su cabeza y no sabía cómo enfrentarlas, así que por el momento no lo haría, se emborracharía, bailaría hasta hartarse y se iría.

Yangyang se estaba llevando sorprendentemente bien con Lucas, no podía creer lo divertido que era. ¿Acaso todos los chinos de esa ciudad eran así? Su risa escandalosa y su hermosa sonrisa le recordaban a alguien. También había resultado ser un excelente bailarín y luego de platicar y conocerse un poco resultó que también era muy bueno en los deportes, tenían muchas cosas en común.

Era parecido y al mismo tiempo tan diferente a los hombres con los que convivía. 

Cuando se cansaron de bailar fueron directo a la barra a tomar algo, sus bocas estaban secas y sus gargantas dolían por tanto reír, gritar, hablar y su cuerpo se sentía cansado de tanto bailar.

- ¿Qué quieres de tomar? – le preguntó el mayor.

- Un refresco está bien – respondió secando su sudor con una de sus mangas.

Luego de un minuto Lucas regreso con dos vasos en sus manos, le extendió su refresco y empezó a caminar hacia afuera de la casa, no necesitó decir nada para que Yangyang entendiera que debía seguirlo.

Sorprendentemente ya no había nadie afuera de la casa, a esa hora todos estaban adentro bailando, tomando o en alguna habitación, las horas habían pasado volando a su lado. Se sentaron en una banca en el jardín de la casa de Renjun, al lado de un hermoso rosal que suponían Renjun había plantado.

- Hoy es una linda noche – Escuchó decir al chico a su lado, el cuál veía hacia a cielo.

Volteó hacía la misma dirección que el joven a su lado y dijo – La luna está realmente linda hoy. –

Sí – Lucas había volteado ahora su rostro para verlo, sentía su pesada mirada admirando su rostro – Pero creo que encontré algo incluso más lindo. – de nuevo sentía el calor subir por sus mejillas.

- Lucas… - pronunció con vergüenza.

- Yang- el mayor tomó con delicadeza su mentón y con esa misma delicadeza lo movió para que pudieran verse el uno al otro- Necesito saber – sus ojos brillaban y Yangyang no sabía decir si era de la emoción que sentía al tenerlo tan cerca, el alcohol haciendo efecto o el brillo de la luna que hacía que Lucas se viera incluso mejor.

- Quiero saber si vas enserio o si solo quieres algo de una noche – Por primera vez en toda la noche Lucas se mostraba serio con él, su mano aún continuaba en su mentón pero podía sentir su respiración cada vez más cerca de él.

- Y-Yo...- No sabía que podía contestarle ¿Qué era lo que buscaba? ¿Qué es lo que quería? – No sé lo que quiero –logró decir con sus mejillas ya rojas, sintió como la otra mano de Lucas se posicionaba en su cintura.

- Entonces quiéreme a mí- sintió los labios de Lucas rozar con los suyos y justo en ese momento cuando sus labios estaban a punto de unirse sintió culpa.Se sentía mal, sabía que no era a Lucas a quién quería como primer beso pero poco importo eso cuando sintió a los labios ajenos moverse sobre los suyos, eran tibios, eran suaves y carnosos.

Roomies. | HENXIAOYANG |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora