𝑆𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡 𝑙𝑜𝑣𝑒 𝑠𝑜𝑛𝑔 [JongKey Fanfic]

Capítulo especial

{Piensa en mí, solamente en mí}

— ¡Pero ¿por qué nos tenemos que ir, hyung?!— pregunta TaeMin, haciendo pucheros mientras se aferra al marco de la puerta. KiBum está tratando de empujarlo fuera. — ¡Yo quiero más pastel!

— ¡Has comido más de lo que deberías, Lee TaeMin! — exclama el pelirrojo, tratando de sacarlo fuera del departamento. — ¡MinHo te llevará a casa así que no me molestes más!

Rindiéndose ante la insistencia de su hyung TaeMin deja de pelear. Su cabello alborotado y la ropa desarreglada no son más que la prueba de lo violento que puede ser KiBum si se lo propone. Aunque es mucho peor cuando anda de mal humor, y hoy no parece ser uno de esos días.

TaeMin diría que es todo lo contrario. Tal vez incluso es una EXCELENTE noche para su amigo.

Más que eso.

— ¿Por qué quieres que me vaya? ¿Acaso no me extrañas, hyung? — bromea TaeMin, tratando de acomodar su ropa ya en la entrada del departamento. — Pocas veces tenemos tiempo de vernos, y ahora me echas como un perro.

— Deja de ser dramático — responde KiBum, recostándose en el marco de la puerta. — Tú y yo podemos ir a comer en cualquier otro momento, pero en esta última semana casi no he podido estar a solas con JongHyun, así que por favor vete. ¡MinHo llévate a este mocoso!

TaeMin ensancha una sonrisa mientras lo escucha. Una sonrisa estúpida y cómplice que para nada puede traer algo bueno.

— ¡Wuuuuuu! ¡Alguien saltará como conejito sobre la cama ésta noche!

— ¡Y-Yah!

KiBum se sonroja furiosamente al entender aquel chiste idiota, y antes de escuchar cualquier otra cosa cierra la puerta en la cara de TaeMin, oyéndolo quejarse al otro lado.

Ni siquiera le importa. Lo único que le hace sentir ligeramente nervioso es ese burbujeo en el estómago, ese retortijo que de alguna manera se relaciona con la broma de TaeMin. Aquel sentimiento que lo empuja a apoyarse de espaldas contra la madera fría de la puerta.

En un intento torpe de calmar mis emociones.

Durante todo lo que va de la noche ha pensado en ello, y no es que quiera parecer un hombre necesitado pero... hay cosas que sí espera que pasen entre JongHyun y él. Tal vez no hoy, tal vez no mañana, pero pronto.

KiBum cree que esa necesidad tan grande, tan fuerte, que recorre su piel cuando JongHyun lo besa es porque el lado más sexual de su personalidad está floreciendo. Ese lado que ha estado dormido durante algún tiempo, y que ahora parece tener todas las ganas de salir a flote.

Si es sincero consigo mismo le gusta mucho la idea de compartir un poquito más con JongHyun, de besarlo durante mucho tiempo hasta que sus labios se cansen, abrazarlo contra su pecho mientras le acaricia el cabello, acariciarlo con sus dedos temblorosos — porque sí, probablemente tiemble como un chihuahua, — cerrar los ojos y disfrutar cada jodida sensación placentera que el amor le dé.

El amor del único hombre que puede hacerle perder la cabeza sólo con una sonrisa.

Su sonrisa.

— ¿Ya pudiste deshacerte de TaeMin, mosquito?

KiBum se despega de la puerta ante la pregunta de JongHyun. Asiente feliz, acercándose de a pocos hasta que logran estar frente a frente. Ambos corazones martillean al saber que ésta será la noche más hermosa para los dos.

— Dijiste que tendrías una sorpresa para mí — susurra KiBum, tomando las manos bronceadas entre las suyas, entrelazando sus dedos.

— La tengo — asegura JongHyun, inclinándose para besar la frente de KiBum. — Tienes que venir conmigo y te la mostraré.