Segundo Encuentro

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Me doy los ultimos retoques, llevo una camisa de hombros destapados de color rosa palido, de tela suave y comoda, unos jean nevados celeste claro y unos botines de cuero en color nude, me he dejado el cabello suelto y decido llevar poco maquillaje, siempre he sido rellenita pero bastante armoniosa, todo es gordito pero todo donde debe estar, perfume, cartera y listo.

Leo me espera muy bien acicalado con su cabello oscuro bien peinado, camisa de vestir blanca y pantalon color camello, zapatillas blancas, dado que es una reunion casual tampoco estamos muy exigentes.

-Lista? - me pregunta

-Lista!- le contesto, salimos de casa y tomamos camino para el barrio de la ciudad donde es el bar, hemos quedado a las 8 de la noche, con los nervios de Leo hemos salido para llegar con unos 15 minutos de ventaja sobre la hora que hemos quedado.

Finalmente llegamos al bar, es un lugar bonito y acogedor, como hemos hecho reservacion previa entonces nos han dado una mesa en el patio del lugar, es amplio y muy verde, esta iluminado por cuerdas con foquitos que le dan un aire muy encantador en la noche, la mesa de nosotros esta en el extremo derecho del lugar bajo la sombra de dos arboles, una mesa de madera pequeña flanqueada por dos sillones comodos con varios cojines y en centro una vela en lo que parece fue una naranja, es amplio y fresco, hay muy buena musica y Leo y yo nos acomodamos en seguida, nos llevan la carta y arrancamos pidiendo un Fernet cada uno, mientras esperamos disfrutamos de la musica, rock clasico que esta sonando en ese momento.

-Que buen lugar conseguiste- le digo acomodandome en el sillon- esta vez sinceramente te luciste, pero me da curiosidad, hay algo importante ahora o es mera casualidad?

-Emm, no- me dice sonrojandose un poco- me esmere porque capaz un ambiente asi, pues de mas lugar, a, ya sabes..

-Entiendo- le digo sonriendole un poco- relajate, se que le gustas, solo dejalo fluir, se vos mismo y tarde o temprano pasara lo que tenga que pasar- le digo y le doy u abrazo

-Cuanto amor!- dice una voz llegando- me van a dar celos chicos- dice Matias

-Sus bebidas- dice la mesera y le guiña un ojo a Leo

-Gra..Gracias- dice el un poco sacado de onda, yo me rio por lo bajo

- Jajaja no tienes que sentir celos - le digo a Matias arqueando una ceja- ni de mi, ni de la mesera- Leo solo se pone rojo.

-Uyy.. llegue tarde! hace mucho pidieron? - pregunta Sol llegando a las carreras como siempre, besandonos a todos, Sol es una chica trigueña y flaquita de largo cabello negro, es hermosa con sus grandes ojos negros y una sonrisa de perfectos dientes blancos, es atolondrada y siempre parece que el tiempo se le acaba, pero es buena persona y no conoce la hipocresia.

-No, no, recien pedimos- le contesto mientras se acerca a darme mi saludo- como estas Sol? no te preocupes, ya haremos volver a la mesera para que pidan ustedes.

-Gracias- me dice con su enorme sonrisa

-Con Leo aqui no debe tardar- dice Mati con divertida ironia, pero puedo percibir un dejo de celos en su voz, eso me causa mucha gracia pero solo me limito a voltear a ver a Leo que parece complacido con esa pequeña muestra de interes.

-Por que lo decis?- pregunta Sol- Que me perdi?

-Nada, nada- le contesta Leo restando importancia-solo parece que a la mesera el radar de gays se le ha atrofiado- dice riendo

-Oh- dice Sol- bueno, no importa, mientras nos atienda rapido, a vos no te importa cierto Mati? - le pregunta coquetamente, aja! ella tambien se ha dado cuenta. EL no contesta y todos nos sentamos. Al poco rato vuelve la mesera y volvemos a revisar la carta. La noche ha comenzado.

DIMITRIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora