~Detalles de la misión~

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Una de las sirvientas tocó mi puerta

-Yumi-sama, su padre la llama. Por favor dirijase al despacho del señor.

-Vooooy *grite* "siempre en el mejor momento..." *pensé para mi misma mientras ponía en pausa la partida y me levantaba*

Heche una carrera de mi habitación a la puerta del despacho de mi padre, frene en seco delante del mayordomo acompañante de mi padre, Sebastian.

-Señorita sabe bien que a su padre no le gusta verla con la katana por la mansión, *me dijo con una mueca en la cara* y si va a hablar no debería estar comiendo.

-De acuerdo... *dije de mala gana*

Deje mi katana a un lado de la puerta y le di el chupa-chups al mayordomo, que inmediatamente lo tiro a la basura; "lo sabia, es que lo sabia" pensé ya tarde para mi.

Entre al despacho donde encontré a mi padre departiendo con el jefe de la cooperativa antivampiros... "Esto no me gusta".

Os contare, pues ya sabéis mi historia, mi padre quiere convertirme en la mejor cazadora de vampiros existente, pero puede que sea por mi sangre yo no deseo matar ninguno, es más deseo conocerlos...

-Hija *llamo mi atención mi padre* ya conoces al señor Cross de la cooperativa.

-Si padre *me dirigí al señor Cross y le hice una reverencia* un gusto verle señor Cross.

-Si un gusto.. Bueno, te estas haciendo grande joven dhampira y creemos que es hora de probar tus habilidades. *me explico rápidamente el señor de barbas blancas*

-Hija tu misión es simple, deberás averiguar si la familia del político Tougo Sakamaki y él mismo son vampiros, es decir irás a vivir con los hermanos sakamakis, después con tus informes nosotros actuaremos *sentencio mi padre*

-Y con nosotros *termino el señor Cross*

-Muy bien... *dije con esfuerzo entre un suspiro* si me permiten me retiro...

"Que?!? Como se le ocurre a mi padre?" salí pensando, cogí mi katana y me dirigí a mi cuarto para prepararme. Las sirvientas me habían hecho ya la maleta y lo único que quedaba en la cama era un uniforme negro y una funda para mi katana. Guarde mi katana en aquella funda y andaba atándola a la matela cuando entro una sirvienta.

-Yumi-sama ha de ponerse el uniforme y arreglarse adecuadamente el pelo para partir.

-EH?!?! Uniforme a estas horas de la noche?

-Señorita *entro el susodicho mayordomo Sebastian a incordiar* los muchachos con los que estará dan clase por la noche los conocerá a la salida de clase.

-EH?!?! *me deje caer en la cama, "tengo que llevar falda yupi!!" pensé, odio profundamente las faldas y eso que suelo llevar legins cortos* pero por que tengo que comenzar ya hoy el colegio con ellos, esta mañana ya tuve clase y examen por encima!

-Ordenes de su padre *se limito a decir*

Con una reverencia ambos sirvientes abandonaron la habitación, dejándome sola. Me empece a cambiar, me puse la camisa blanca, los lazos y aquella horrorosa falda negra; me puse las medias dejando una mas baja que la otra y los zapatos, por último la chaqueta. Me solté mi pelo blanco, con un mechó negro al frente, que había estado atado en un kiki y me puse una diadema negra, realmente mi pelo era muy corto, a la diadema le puse un pin de una cara desangrándose.

Ya estaba lista para irme.

(Aqui esta el segundo cap bueno espero que les haya gustado. Voy a dar algunas aclaraciones: el mayordomo por supuesto tenia que llamarse sebastian ヽ(*≧ω≦)ノ como todo mayordomo que se precie y bueno para que se hagan una idea la chica de la historia es casi identica a la de la imagen de la historia, el pin vendria a ser parecido al de noiz.)

Una cazadora en Diabolik LoversDonde viven las historias. Descúbrelo ahora