Elecciones Diferentes [ABANDONADA]

Capitulo 31

Lamento subir hoy el capítulo, lo tuve apenas listo ayer por la noche, pero salí a cenar con mis padres y ya no pude actualizar.

Advertencia: cambio drástico de escenarios, sólo lo digo por si acaso.

.

.

Capítulo 31: Visita Al Barrio Uchiha: Revelación.

Una semana había pasado desde que los de Akatsuki llegaron a Konoha, la mayoría de los aldeanos aún les veían con recelo, pero ellos les ignoraban olímpicamente; Konohamaru había intentado acercarse a Naruto pero este le había hecho a un lado. Kiba logró cumplir con su apuesta aunque paso uno que otro rato vergonzoso, como cuando tuvo que ir a comprar la ropa interior de la chica o cuando tuvo que salir solo en ropa interior de las aguas termales porque recordó que tenía que estar donde ella en menos de un minuto, o cuando ella le hizo usar un ridículo disfraz de gatita y andar con eso puesto todo un día, lo pero fue cuando le obligó a usar un traje de maid negro, femenino y corto por tres días, fue lo más vergonzoso ya que debía portarlo a todas horas, hasta su madre se rió de él; en fin, fue la pesadilla de su vida porque Kishasa no solo le hacía cumplir sus caprichitos, sino también los antojos de Naruto, pero logró completar la apuesta sin terminar loco o morir.

Neji aún era molestado por lo del beso y continuaba sonrojándose ante cualquier comentario sobre el tema que le hiciesen Kishasa o Naruto. Sasuke intentó millones de veces saber algo de Itachi, más no consiguió información. Tsunade y Sakura interrogaban a Naruto en busca de respuestas pero nada, él no hablaba, solo se burlaba y salía a entrenar con la niña. La rutina era entrenar por las mañanas, siempre era un entrenamiento diferente pero todos exhaustivos o complicados según los chicos, se volvió costumbre que los ninja de la Hoja viesen esos entrenamientos, sorprendiéndose por la manera de combatir o conseguir perfeccionar técnicas; con eso Shikamaru había descubierto que Naruto usaba elementos katon, suiton y futon, y que la niña podía manejar todos, incluido el hielo, además de copiar técnicas en poco tiempo, tenían que cuidarse de ella. Después de entrenar se iban a almorzar a Ichiraku, donde el dueño y su hija observaban a Naruto y le regalaban sonrisas que él solo pasaba de largo; por las tardes salían a caminar o entrenaban otro rato, dependía de sus ánimos.

En fin, no habían avanzado mucho que digamos respecto a convencer a Naruto, pero al menos le habían sacado una o dos sonrisas desde lo de Neji y Kishasa. Naruto pensó en todo eso mientras se duchaba, hoy entrenarían un poco más el dichoso modo sannin, tomó una toalla y salió del cuarto de baño.

-Kish, ¿dónde dejaste la ropa que iba a usar hoy? - tenía los ojos cerrados y se secaba el cabello con otra toalla.

-La dejé sobre la cama - le escuchó decir, vio hacia su cama y tomó las prendas, luego se giró para agradecer:

-Gra... - se detuvo en medio de su frase pues se encontró con una Hinata sonrojada a más no poder viéndole. Mierda. Se olvidó que la chica había tomado por costumbre ir a ayudar a Kishasa a preparar el desayuno siempre que podía. Un ligero, muy ligero tono rosa se posó en sus morenas mejillas. Rogaba porque su amiga no lo notase.

-¡Anda a cambiarte, Naruto-kun! Mira que si sigues así, Hinata-san se convertirá en un tomate - sonrió burlonamente sonrojando más a la chica que apartó la vista, Naruto no le contestó, solo regresó rápido al baño para vestirse. Diablos, ella se veía tan tierna sonrojada. Luego de unos segundos salió de nuevo, solo para escuchar la risita de Kishasa y ver a Hinata de nuevo sonrojada. Alzó una ceja.

-¿De qué te ríes? - Hinata palideció y enrojeció en cuestión de segundos al escucharle, Kishasa giró y comenzó a servir el desayuno.

-Nada que te importe - se alzó de hombros, de nuevo él alzó una ceja, ¿no le diría? - Desayunemos - se sentaron los tres a la mesa y, cuando iban a dar el primer bocado, la puerta sonó. Naruto suspiró, resignado, y fue a abrir.