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5 años después:

"Se les informa que hoy a las seis de la mañana fue encontrado el cuerpo de una mujer sin vida, Kim Suni era su nombre, su cuerpo fue hallado en su sótano con daños múltiples, con sangre en las paredes estaba escrito, 'yo jamás olvido y mucho menos perdono, Suni, es la primera víctima más no la única', familias tomen precaución, los policías sospechan que se trata de un asesino en serie, no se hallaron pruebas y por eso están haciendo lo posible..."


El castaño apagó la televisión en donde ya se hablaba de la muerte de Suni, los vecinos escucharon algunos gritos de parte de la mujer, suerte que el logró escapar sin dejar pruebas, comenzó a reir de manera estruendosa por que nada había fallado, en sus manos estaban las fotos de su víctima ya sin vida, su rostro aún tenía ciertos rasgos de sangre pero para su suerte nadie lo vió en ese estado, por lo que lleno de éxtasis disfrutaba de aquel momento recordando cada emoción vivida .

—Descansa en el infierno querida madre, estoy seguro que estarás muy a gusto, después de todo perteneces ahí, ese siempre fue tu maldito lugar—el castaño miró por última vez las fotos para después tirarlas al suelo con una gran sonrisa de satisfacción, nada podía arruinar aquel mágico momento en el que él estaba envuelto.

Colocar música clásica a todo volumen era su manera de festejar y revivir sus recuerdos, comenzó a bailar al compás de la sintonía por toda la casa festejando de lo más felíz y alegre, su característica sonrisa que cualquiera pensaría que pertenecería a alguien puro e inocente estaba siendo inspirada por pura maldad, fue dócil y muy sumiso tiempo atrás pero eso cambio gracias a las personas a su alrededor, como dicen: "Todo lo que siembras cosechas, todo lo que das recibes" y como buen muchacho eso estaba haciendo, el castaño estaba regresando lo que alguna vez vivió y estaba feliz, muy feliz por que todo iba bien con sus planes.

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—P-por favor dejame ir, hijo, perdóname no era mi intención causarte tanto daño—La mujer comenzó a llorar desesperadamente temía por lo que le podría pasar—Fue un error lo admito, no debí de haber echo eso contigo, eres mi hijo, mi único hijo...—Intento levantarse para abrazarlo pero el castaño la empujó con brusquedad tumbando su cuerpo hacia el mismo lugar.

—Tranquila, seré piadoso contigo, te daré una muerte lenta y tortuosa, ¡Pero!—Exclamó con una gran sonrisa juguetona—Te aplicaré una inyección para que no te puedas mover y no sientas dolor...o al menos se dice eso...-el castaño despreocupado tomo una jeringa y la inyectó por todo el cuerpo de la mujer sin un mínimo de cuidado dejando heridas que causaron un pequeño sangrando y dolor.

—¡No! ¡No!, Y-yo no diré nada, dejame ir por favor, sabes que yo te q-quiero..te le suplicó...piedad..—La mujer intento formular bien las palabras ya que aquel dolor era insoportable para su cuerpo y le impedía hablar, ella estaba segura que en cualquier momento gritaría aún mas fuerte de dolor, conectó los ojos de su hijo con los suyos en busca de arrepentimiento o miedo pero tan solo al ver la sonrisa que este tenía sabía que no tenía escapatoria alguna.

—Pedir piedad es de idiotas, de estúpidos que no sirven para nada, débiles quienes no aceptan su destino, estas fueron tus palabras cuando yo te lo pedía y tu te reías en mi cara—El castaño tomo un cuchillo y lo paseo por todo el cuerpo de la mujer con una gran sonrisa—Te rogué, supliqué y lloré ¿Para que?, ¡Para que tu dejarás que me sigan violando mirando como si nada!

La mujer gritó en el momento en que él castaño clavo el cuchillo en su brazo, más no se pudo mover por lo que sea que el castaño le había aplicado, se quedó observándolo y al hacerlo en sus ojos solo pudo percibir odio puro hacia ella.

—Hombres venian, te pagaban y tu dejabas que me utilizarán como un trapo al cuál utilizas hasta que ya no sirva y tirarlo a la basura—el castaño volvió a clavar el cuchillo en el otro brazo de la mujer—No mereces perdón y mucho menos misericordia y si verte sufrir como yo lo hize me lleva al infierno por mi esta bien.

—¡L-lo si-siento...—la mujer respiraba con dificultad—E-en es-ese momento n-no pensé en tu dolor, e-en verdad l-lo siento

—Demasiado tarde para tus patéticas disculpas—Él castaño tomo un alambre con púas y lo coloco alrededor del cuello de la mujer de manera lenta—Fuiste alguien horrible conmigo, jamás me amaste tu solo sentías menosprecio hacia mí—El castaño hablo con la mirada perdida al recordar el dolor que sintió en el pasado y comenzó a poner presión en aquel alambre, la mujer se retorcía intentando liberarse pero ya era muy tarde, la sangre salpicó al rostro del castaño, la sangre se siguió dispersando creando charcos de sangre sobre el suelo, no podía dejar de disfrutar ver el cuerpo ya sin vida de la mujer

Minutos después aparto sus manos del alambre y de su mochila saco otro cuchillo y se lo clavo en el estómago, buscando defogar todo el dolor en su interior, haciendolo tantas veces sin parar, aún así su corazón y alma, no se sentían libres.

—Fue lindo volver a verte mamá, pero debo irme antes de que me descubran, dulces sueños—Él castaño le dio un beso en la mejilla y un punzón en su corazón sintió, recordando a aquella mujer—Si tan solo me hubieras amado, como yo a ti—Limpió sus lágrimas y comenzó a quitar todo rastro que lo delatará.

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Subió las escaleras de manera lenta pero precisa hacia su habitación, al entrar fue directo al baño para darse una ducha, al salir se vistió con algo cómodo y sutil, se miró en el espejo quedando satisfecho con el resultado, arregló su cabello para después volver a mirarse a través del espejo y sonreír.

Bajó las escaleras un poco acelerado, miró por toda la sala de la casa en busca de su mochila, al encontrarla la tomo y salio de su casa en camino hacia la universidad, observó a su alrededor sin ningún tipo de expresión solo mantenía una neutra pues pensaba en que ese día volvería a ver a los que lo lastimaron y continuó con su camino, no quería una tardanza en su nueva universidad.

Subió a un autobús ya que por mas que le hubiera gustado caminar no podia, la universidad estaba a 30 minutos de su casa y era un poco tarde. Ya habiéndo llegado a su destino bajó del autobús y caminó hacia la entrada de la universidad, se miró en el reflejo de una gran ventana y asintió con seguridad convenciéndose de que eso era lo mejor.

❥ Dᴜʟᴄᴇ Vᴇɴɢᴀɴᴢᴀ ᵏᵒᵒᵏᵛDonde viven las historias. Descúbrelo ahora