❥ Dᴜʟᴄᴇ Vᴇɴɢᴀɴᴢᴀ ᵏᵒᵒᵏᵛ

04

El día había llegado a su fin y el castaño decidido ir a una cafetería antes de ir a su casa necesitaba despejar su mente, habia sucedido tanto que su corazón sentía miedo e ira al recordar, en cuanto llegó tomo asiento y espero a que el mesero llegara.

—Hola, buenas tardes, bienvenido sea al café  "dreamers" ¿Cuál será tu pedido?—dijo un sonriente chico el cual le pasó la cartilla e hizo que el castaño se pusiera pensativo por escuchar el nombre del local, soñadores...él quería ser uno de ellos, poder tener la posibilidad de soñar y creer.

—Bien, creo que quiero un capuchino, gracias—Él castaño sonrió y le entregó la cartilla

—Enseguida—Él chico sonriente hizo una reverencia y comenzó a preparar el capuchino para entregarlo a su cliente.

12 minutos pasaron y el castaño ya tenia su orden en mano, miró por la ventana y sin estar listo para lo siguiente, observó a cierto pelinegro junto a una chica, el pelinegro se veía tan despreocupado, tan feliz, lleno de vida y Taehyung deseaba nunca haberlo visto.

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—¿Me amas?—preguntó en ese entonces pelinegro, con lágrimas en sus ojos a punto de brotar en cantidad por su rostro.

—Taehyung, deja de hacer estúpidas preguntas, si no fuera asi ahora no estaría contigo—El peliazul  dijo con el ceño fruncido

—¿Es la verdad?, dime la verdad y quítame esta duda, se honesto...—Él pelinegro dijo de rodillas, sintiéndose tan desesperado—No quiero sufrir más, yo...—Miró al mayor quien se alejó bruscamente de él, mirándolo de una manera, que lo hacía sentir insignificante.

—Si vas a continuar con tus estúpidos berrinches me iré—Él mayor tomo su celular y salio del departamento echo furia.

Él pelinegro miró la foto, aquella foto que fue tomada meses atrás, aquella que tenia con amor, donde a él se le podía ver feliz, como no estarlo si estaba con la persona que amaba, pero al contrario solo podía ver indiferencia al estar cerca de él, su rostro no reflejaba nada, mucho menos amor.

Lo amaba como no hacerlo, fue la persona que lo salvó del abismo, aquel chico lo había dado lo que nadie, le prestó atención, pero aquello le duró tan poco, que a pesar del cambio repentino, solo buscaba volver a aquellos tiempos dónde ambos reian, jugaban y charlaban, pero cada día se sentía tan lejano que algo así sucedería.

—¿Cuándo me dirás la verdad Jungkookie?, yo te amo, pensé...que tu me amabas, duele, pero seguiré y aguantaré por que de alguna manera se que todo será como antes y seguiré siendo feliz a tu lado—Él pelinegro abrazó la foto aferrándose a esa falsa felicidad que creababy esperaba.

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El castaño sacudió la cabeza en un intento de borrar esos recuerdos y volvio a tomar de su café

Al terminar de hacerlo le pagó al mesero y salió del local, satisfecho con el trato del mesero y se dispuso a caminar hacia su casa. Antes de continuar su camino miró el cielo el cual se encontraba gris y sonrió leve, le gustaba la lluvia y parecía que pronto habría una.

—Taehyung—Escuchó una voz detrás de él y de inmediato la reconoció, aquella voz le pertenecia a esa persona que le hizo sufrir tanto, que lo dañó de tal manera, que solo de recordar dolia.

El castaño volteó y miró al pelinegro con una leve sonrisa—¿Jungkook?

—¿Eres tú? Después de tanto, te encontré—El pelinegro se acercó con la intención de acariciar la mejilla del contrario pero este tomo su mano y la alejó.

—Si, yo e vuelto, pero no soy el mismo a quien buscas...—Suspiró el castaño intentado calmar su interior—En la universidad también lo hicieron, quisieron repetir viejos escenarios.

—¿Dónde estuviste todo este tiempo?—Insistió el pelinegro con lágrimas en los ojos.

—Oh, lo siento mucho, pero es algo que no tengo por qué decirte...

El pelinegro asintió aún con sus ojos llenos de lágrimas—Te hice mucho daño ¿No?, en verdad lo siento.

—Yo no vivo del pasado—Primera mentira—Tampoco los culpo por lo que me pasó, éramos jóvenes, fue hace mucho—Segunda mentira—Y Jungkook, ambos lo sabíamos nunca me amaste, lo entendi y lo superé —Una mentira más y aunque le hubiera gustado que sea asi, nunca pudo olvidar ni perdonar.

—Taehyung...—Susurró el pelinegro sin dejar de mirar el rostro del contrario.

—Esto es un tanto incómodo —Lanzó una leve risa e hizo una reverencia —Ya es tarde, debo irme—Y así sin más del cielo empezaron a caer gotas, la lluvia ya había llegado y mientras Taehyung caminaba alejándose del contrario sin dejar que este hablara, su corazón empezó a doler sin motivo alguno

Continúo caminando bajo la lluvia mientras los recuerdos comenzaron a golpear su mente, su cuerpo comenzó a temblar y lágrimas comenzaron a caer sin su permiso, su corazón se estrujaba aún más y sentía un horrible nudo en la garganta, todo comenzó a dar vueltas y sin más su cuerpo se dejó caer al suelo.

—¡Mierda!—Gritó frustrado el castaño intentado levantarse pero al instante un paraguas lo cubrió de la lluvia.

Por un instante pensó que sería Jungkook, pero sabía que desear algo así estaba mal, aún peor cuando este es el principal causante de su dolor, así que levantó la cabeza y observó a un chico, y por algún motivo este era el que lo atendió en la cafetería aún poseía la misma sonrisa acogedora con la que vio por primera vez.

—Hola chico bonito—El castaño miró al chico con confusión, nunca lo habían llamado asi, pero esas palabras, la acción de cubrirlo de la lluvia y levantarlo del suelo, se sintió cálido.

—¿Por que me ayudas? No nos conocemos.

—¿Por qué no hacerlo?—El contrario sonrió y le extendió la mano, para poder tener un saludo formal—Soy Jung Hoseok.

El castaño dudo pero tomó la mano del contrario aceptando su saludo—Mi nombre es Taehyung...

—Sabes, yo prefiero decirte chico bonito—Volvió a sonreír y al ver que ya estaba mejor cubrió el cuerpo de Taehyung con su chaqueta—¿Dónde es tu casa?, te acompaño, quiero asegurarme de que estés a salvo.

—Esta bien...—Sonrió y comenzó a caminar de la par de una de las pocas personas que fueron amables con él.