𝐄𝐌𝐈𝐋𝐘 𝐘 𝐂𝐎𝐎𝐏 caminaban por el sendero del parque, sus pasos resonando en el pavimento mientras el sol de la tarde comenzaba a declinar. La conversación entre ellos fluía con naturalidad, como si se conocieran de toda la vida. La última tarea de geografía había sido un tema recurrente en sus diálogos desde el inicio del curso. Era la única materia que compartían, y como eran compañeros de proyecto, pasaban mucho tiempo juntos fuera de las horas de clase. La proximidad entre ellos no pasó desapercibida para los amigos de ellos, que pronto comenzaron a lanzar miradas curiosas y susurros intrigados.
—Creo que deberíamos grabar la parte sobre las características físicas del paisaje en el video de nuestro proyecto—sugirió Coop mientras ajustaba la cámara de su teléfono—Esto le dará un toque más dinámico.
Emily asintió, tomando nota mental de los lugares que debían incluir—Sí, y no olvidemos añadir el comentario sobre la influencia del clima en el ecosistema local. Eso puede ser interesante para la presentación.
Mientras tanto, Charlotte y Taylor, que estaban sentadas en una banca cercana, intercambiaron miradas inquisitivas y los observaban de lejos. Taylor inclinó la cabeza hacia el parque.
—¿No les parece raro que Coop y Emily estén siempre juntos? No los he visto tan cerca de nadie más.
Charlotte, que era conocida por su curiosidad, se encogió de hombros—Tal vez solo están haciendo un proyecto. Pero me intriga saber cómo están llevando esto.
El sol se había puesto por completo cuando Emily y Coop terminaron su grabación. Se despidieron con una sonrisa, ambos disfrutando del tiempo que habían pasado juntos. Emily se dirigió a casa, mientras Coop se reunía con el resto del grupo.
La noche estaba en pleno auge cuando Coop y sus amigos se reunieron en la sala de estar de su casa. Cami, Fred, Ollie, Charlotte y Taylor estaban listos para la grabación de un nuevo video. La idea era hacer una rutina en reversa, una de esas locuras que solían divertirlos y a sus seguidores.
—Vamos a hacerlo—dijo Fred mientras ajustaba la cámara—Pero esta vez, asegurémonos de que sea realmente divertido.
—¡Sí!–exclamó Cami, entusiasmada—Recuerden, la clave está en la sincronización. Así que practiquemos un poco antes de empezar a grabar.
La sala se llenó de risas y energía mientras ensayaban la rutina. Coop y Emily, que habían llegado justo a tiempo, se unieron al grupo. A pesar de que Taylor se sentía algo nerviosa al principio, pronto se dejó llevar por la diversión del momento. La coordinación entre todos no era perfecta, pero esa era la esencia del juego: la diversión más que la perfección.
