Una chica de quince años llamada Abril se fuga de su casa tras ser sometida a montones de acusaciones por parte de sus padres y sus compañeros de clase, que no se dan cuenta de que ella no es feliz. Sus únicos amigos de su nueva escuela la buscan de...
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Freezer examinó a Kisugi unos minutos. Abril le aconsejó hacerlo un soldado para ayudarla a ella a encontrar las esferas del dragón más rápido. «Cuatro manos son mejores que dos», afirmó.
─¿Eres ágil?─ le preguntó el emperador al chico, quien intentaba no parecer una hoja temblorosa frente a él. Si lucía asustado, lo matará sin piedad.
─P-pues... Soy muy bueno en el fútbol, aunque no soy cien por ciento ágil en todo lo demás.
─¡¿A quién demonios le interesa el fútbol?!─ le gritó. La seguridad que tenía Kisugi se derrumbó como las Torres Gemelas.
─Ya, cálmate, Free-chan─ le pidió Abril.
Kisugi sentía que se le iba a salir el corazón del pecho.
─¿L-lo llamaste "Free-chan"?
Zarbon suspiró.
─¡Te he dicho toda la semana que no me llames así!
─Pero es que es muy adorable, como usted─ le pellizcó suavemente una mejilla. Zarbon y Kisugi no podían creer lo que estaban viendo. Zarbon ya se había acostumbrado a esas cosas desde que ella llegó, pero no podía creer que ella trataba al gran emperador del mal como si fuese una persona cualquiera a la que le puedes pellizcar las mejillas sin problemas. Freezer es perfectamente capaz de matarla con un sólo dedo.
Por otro lado, a Kisugi casi le daba un paro respiratorio.
─¿Sabes algo? Podría matarte ahora mismo sin ninguna dificultad, pero si lo hago entonces perderíamos la fuente de toda la información sobre las esferas del dragón. Compórtate como se debe ante el emperador del mal y te dejaré con vida.
─Dices tantas cosas crueles, Free-chan. Yo le digo así porque lo quiero, y lo considero un excelente emperador.
─¿Segura que no te estás burlando de mí? Tal vez por mi apariencia toda colorida y mi estatura bajita, parezco inofensivo, pero soy más peligroso de lo que aparento. Ya lo demostré matando a los inútiles de mis soldados que trajeron a este mocoso.
─¡Yo jamás me burlaría de ti, Free-chan! ¿Cómo burlarme de la persona que me dio un excelente hogar?
─Como sea. Dejemos este tema de lado. Por ahora lo principal es encontrar las otras cinco esferas del dragón.
─¿No va a convertir a Kisugi en un soldado, gran Freezer?─ le preguntó Zarbon.
Freezer miró al chico de reojo. Kisugi no pudo evitar sentir un temblor en su cuerpo.
─Si logran entrenarlo para que mejore su agilidad, y le cambian esos feos harapos por una armadura mucho más decente, podrá ser un soldado hasta que termine la misión, luego podrá marcharse en paz. Los dos podrán irse.
─S-sí, señor Freezer─ respondió más seguro Kisugi─. ¡Esforzaré para ser un gran soldado y servirle a usted!─ se arrodilló.
