os hyewon

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—Buenas tardes.

—¿Tan formal?— Chaewon levantó sus ojos de la pantalla que estaba viendo y finalmente notó la presencia de la osada pelinegra que se había atrevido a cortejarla a pesar de la diferencia de edad.

—¿Qué haces aquí?— Preguntó mientras veía como Hyejoo cerraba la puerta detrás de ella. —¿Saben tus padres que estás aquí?— La molestó.

—No, no saben.

—No te busques problemas.— Le advirtió medio en broma mientras volvía su vista a la pantalla creyendo que la pelinegra obedecería.

Si bien la joven le atraía, y bastante, prefería evitarse y evitarle los problemas. Una relación así podría ser muy mal vista y aquella chica seguro tendría muchas otras opciones.

Escuchó las pisadas Hyejoo acercarse y cuando volteó para encararla se encontró con sus labios atacándola en un beso mucho más intenso que cualquier otro recibido en sus veintiséis años.

Intentó separarla, empujándola desde su hombro, pero su fuerza parecía escabullirse gracias a los habilidosos y tentadores labios de la pelinegra.

Hyejoo se acomodó en el regazo de Chaewon y acarició sus hombros por encima de su blusa, mareándola con su sabor.

—Para.— Dijo la mayor en un suspiro, sin embargo requirió toda su fuerza de voluntad para decirlo.

—¿Por qué? Te gusta.— Contestó mientras empezaba a bajar por su cuello.

—No, esto no está bien. Hyejoo.— La llamó con más firmeza cuando la menor había empezado a bajar más, llegando hasta la curva de su pecho. —No hagas esto.— Dijo mientras empujaba suavemente su hombro, alejando el rostro de la pelinegra.

—Me gustas.

—Lo sé.— La cortó antes de que siguiera. —Pero no podemos, eres menor de edad.

—Seré mayor el próximo año.— Insistió.

—Hyejoo..

—¡Por favor, espérame! Perdón por todo esto.— Mencionó señalando sus piernas, que aún se hallaban rodeando las caderas de la mayor. —No sé expresar bien las cosas pero quería que entendieras que de verdad me gustas.

El corazón de la mayor fue derretido por la imagen de aquella chica "ruda", sentada en su regazo, haciendo un puchero y mostrando las mejillas sonrojadas mientras evitaba su mirada.

Dejó un pequeño beso en el puchero de la menor, sorprendiéndola.

—Te esperaré.— Le dijo mirándola dulcemente y acariciando su espalda con cariño. Los ojos de la menor brillaron.

—¿De verdad?

—De verdad.

Un poco más tarde, Hyejoo tuvo que salir de la oficina y dirigirse hacia su casa, esta vez con una inusual sonrisa decorando su rostro.

En cuanto a Chaewon, no era muy buena mostrando sus emociones en sus expresiones, pero ciertamente, las personas notaron un brillo diferente en sus ojos.

Era seguro, ambas esperarían el próximo año con más emoción de la normal.

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¿Qué piensan de las relaciones entre alguien menor y alguien mayor? 🤔

—Muse

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