Ya al fin en casa, después de todo lo que me dijo Franco me arrepentí completamente de la tremenda cagada que me mandé. No es la primera vez que lo había hecho, antes lo hacía más seguido pero esta vez se me pasó la mano y me fui al carajo.
-Me parece que tenés que ir al psicólogo -me dijo Mónica mientras que mi abuela me cambiaba la venda de la muñeca.
-Abuela, ¿no escuchas un ruido molesto? -fui sarcástico y la ignoré a Mónica por completo.
Ella se fue llorando y vi como iba a la cocina y abrazaba a mi ""hermanastro"".
-Fuiste un poco forro...-mi abuela usando ésas palabras? Si.
-Yo, forro? Todo lo que me hizo ella? Todo lo que NOS hizo ella? -agarre la carta que me había escrito que estaba en mi mesita de luz y la arruge toda- ¡SI TANTO AMABA A FRANCO PODRÍA HABER MANDADO UN PUTO MENSAJE, UNA PUTA LLAMADA! ¡HACE DIEZ AÑOS QUE NO TENGO SU "FELIZ CUMPLEAÑOS, HIJO"!
Empecé a llorar y abracé a mi abuela, quise que me haya tragado la tierra cuando vi que Franco estaba en la puerta escuchando todo.
*****
No tuvimos una cena en paz, tranquila. Yo me senté en la mesa sólo por respeto porque no tenía ni una gota de hambre -raro en mí- ni ganas de aguantarme al señor que se casó con mi mamá ni a mi hermanastro.
En la mesa había pura amargura y cara de orto de parte se Franco, de mi abuela y mía, mientras que mi mamá y su maridito no paraban de hablar sobre ellos dos.
-Manuel, puedo pasar al baño? -juro que fue la primera vez que escuché hablar a James.
-Si, vení.
-Gracias -le respondí una sonrisa falsa y le señalé el baño-. Mirá, vos me caes muy bien, te lo juro. Quizá que a vos te duela que tu mamá los haya cambiado a ustedes por mi papá , quizá te duele mucho que a mi me quiera y a vos no...
-James, algo más?- golpeé con puño seco la pared y apreté los ojos para no dejar caer ninguna lágrima.
-Ella nunca nos dijo de ustedes -me derrumbe en el piso, ya lo que tenía era más bronca que ganas de llorar-. Al menos a mi, nunca me dijeron nada, pero yo sabía que tu mamá me ocultaba algo así que investigué y no pare hasta encontrarte a vos y a Franco, y la odié. Te juro que odié a la desgraciada esa. Se que no me vas a creer porque sólo tengo 15 años, pero lo hice, y te entiendo y entiendo o trato de entender lo que estas viviendo.
Me abrazó y se metió al baño. Petrificado. Así me quede.
*****
-Y James? -me preguntó el esposo de Mónica. Me dan arcadas cada vez que pienso o digo su nombre.
-Lo mate y lo tiré por el inodoro -.rieron.- No es joda.
-MANUEL!!! -gritó mi abuela al cual respondí con una carcajada.
-Está en el baño -. otra vez el clima de seriedad y silencio en la mesa-. Y... ¿tienen donde pasar la noche?.
-Iremos a un hotel.
-James se queda a dormir acá -dije y todos me miraron cómo si planeara matarlo.
