Cinco

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Salir de fiesta con Louis siempre es o la mejor o la peor idea del mundo. A veces es entretenido, bordeando la locura; a veces es una locura bordeando lo ilegal y/o letal. Ahora mismo es ilegal, ya que, legalmente, él no puede beber acá, pero además de eso se quedan en el lado entretenido de locura.

El club en el que están es el tipo de lugar que le encanta; muy oscuro, lleno y perfectamente anónimo. Las luces iluminan las caras solo momentáneamente, y para el momento en que cualquier persona pueda siquiera pensar que los reconoce, ya están lejos en la multitud, fuera de vista y pensamiento en segundos.

"Iré a buscar algo para beber," grita Louis sobre la música. "Tú solo– quédate por esta área e intenta no perderte."

Zayn asiente y con cuidado se mueve entre la multitud, siempre volviendo al mismo lugar pero nunca quedándose quieto por mucho tiempo. Recibe miradas, unas de chicas lindas en vestidos cortos o shorts aún más cortos. También de algunos chicos, pero no son miradas de 'oye, ¿no eres de esa banda?'. Son miradas de 'oye, ¿quieres volver a mi casa y follarme sin descanso?' a las que está igual de acostumbrado. No es por ser engreído, pero hechos son hechos.

Se está alejando de un par de brazos delgados envueltos en algún tipo de crema brillante que se pega a su ropa el segundo que los tocan, cuando Louis vuelve con dos bebidas. "¡Ni siquiera me pidieron identificación!" grita por sobre la música. "No sé si es porque este lugar es basura, o es que me veo lo suficientemente viejo como para no necesitar mi identificación. Estoy un poco ofendido."

Zayn rueda sus ojos y toma la bebida que le está ofreciendo. "¿Qué es esto?"

"¿Acaso importa? Es azul. Sólo bébelo."

Y Zayn solo se lo bebe. Y el siguiente, que es rosa neón y sabe a rosas, por lo que se lo acaba en dos sorbos. Y luego uno verde, y, en serio, ¿no le pueden dar simplemente vodka y coca cola? Pero para cuando se toma el trago naranja ya está demasiado ido como para que le importe. Está bailando principalmente con Louis, aunque ocasionalmente alguien se acerca demasiado a él, o Louis es atrapado en la ola de extremidades y música electrificante. Cada centímetro de su piel tiene una capa de sudor y se siente ligero y bien; muy, muy bien.

Hasta que Louis suspira y le muestra su celular. Zayn se pone bizco, intentando entender la imagen pixelada que le está mostrando. Está muy borrosa, ya sea por la calidad de mierda de la foto o por lo ebrio que está, y le toma un momento descifrarla. Cuando lo hace, reconoce el perfil de Liam iluminado por llamativas luces en otro club, parecido a este, excepto que tiene los brazos de un chico alto e increíblemente musculoso rodeando su cintura y están bailando algún tipo de conga extraña y provocativa o algo así.

"¿Qué sucede con él?" grita Louis en su oído. "¡Perdió la cabeza!"

"No es mi problema ahora mismo," dice Zayn descartándolo. El alcohol en su sistema casi lo convence de que es cierto, pero la preocupación que se encuentra en su pecho le dice lo contrario.

"¡Por supuesto que es nuestro problema!" le grita Louis. "¡Se refleja en todos nosotros!"

Zayn rueda sus ojos e intenta alejarse, escapar hacia la masa de cuerpos. No funciona. "Todos hacemos estupideces a veces," le recuerda a Louis. "Déjalo ir."

"Lo dejaría ir," dice Louis, "si no me asustara tanto. Y no me digas que no te asusta a ti también, porque sé que lo hace. Es preocupante. Y amo al estúpido desgraciado, y no sé qué hacer porque me espanta. Al principio lo descarté. Acababa de salir de una relación, se estaba relajando. Pero han pasado meses, Zayn, y está empeorando. El otro día, en esa entrevista—"

"¿Es eso lo que era esta noche?" exige saber Zayn. "¿Me trajiste aquí para intentar sacarme información? Porque no sé nada. No me dice nada, así que tus esfuerzos son en vano, Louis."

The Way It Is | TraducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora