WANT YOU BACK. |JohnTen|

10.

•No está mal volver a empezar•

Caminaron un poco por la casa y en silencio recordaban algunos momentos ahí, una vez estaban tan aburridos de todo que fueron ahí, tuvieron su mejor cita, tal vez podrían tener una parecida en ese momento. John no esperó más y volvió a abrazarse a la espalda del bajito, acariciando su pancita con sus manos pegándose a él.

Chittaphon se dejó abrazar, casi acurrucándose de esa manera, entrelazando sus dedos después con las manos que antes acariciaban su estómago, John besó la piel de su cuello y soltó sus manos después para ponerlas en sus hombros haciendo que se girara hacia el, bajó sus manos hasta sus piernas y lo levantó en sus brazos sin necesidad de decir nada, los hombros del alto fueron rodeados con los suaves brazos del tailandés.

John se quedó unos segundos quieto en su lugar, acariciando la espalda del chico con una de sus manos ya que la otra sostenía su cuerpo, caminó después hasta la sala de la casa sentándose en el cómodo sofá con su pequeño en su regazo, continuando las caricias en su espalda lentamente.

- te amo, tanto que duele el ya no estar a tu lado todos los días. - John susurró y lo alejó un poco para poner sus manos en sus mejillas pidiendo la atención de sus ojos con los propios. -  no quiero volver a llorar pero si te tengo mirándome así..no puedo evitarlo.

- no llores..- Chittaphon pidió con susurros y acarició sus mejillas también. - te amo tanto como tú a mi, me duele tanto como a ti, te necesito tanto como tú a mi.

- entonces..si yo te amo y tú me amas, ¿qué más necesitamos? perdóname por lo mal que te hice sentir y dame una segunda oportunidad, volveremos a ser felices con nuestra familia y no volverán a haber problemas, lo prometo. - John habló con tranquilidad, con las cejas elevadas al mirar los ojos nuevamente cristalizados  del tailandés que lentamente asintió con la cabeza, se abrazaron otra vez hundiéndose en el cuerpo contrario sintiendo otro tipo de tranquilidad, una hermosa tranquilidad.

Se separaron un poco de nuevo por culpa de John que puso sus manos en las mejillas del chico, necesitando besarlo. Sus rostros se acercaron lentamente, mezclando sus alientos mientras sus miradas subían y bajaban casi desesperadamente de los ojos hasta los labios contrarios, se juntaron después de pocos segundos así.

Su beso no era para nada lento, la necesidad de ambos les hizo ir rápidamente de forma brusca, no tenia nada de parecido con el beso que John le había dado algunos días atrás. Las manos de Chittaphon se entrelazaron en el cabello del estadounidense que bajó sus manos hasta la pequeña cintura del cuerpo que tenía encima, sus labios se movían tan rápido que luego de algunos segundos empezaron a doler un poco. Continuaron el beso hasta que el aire no era suficiente dentro de ellos, pararon por algunos segundos separándose solo un poco y manteniendo sus ojos cerrados regresando a su beso rápidamente, tomándolo con más calma, moviendo sus labios lentamente divirtiéndose en su beso y enamorándose más del otro en cada segundo que pasaban pegados.

Pasaron casi una hora en esa posición, no hablaban mucho, se daban pequeños besitos y caricias que calmaban aún más sus cuerpos y almas. Se sentían felices, por fin pudieron volver a confesarse todo ese amor que casi a la fuerza habían negado cuando se separaron. El teléfono de Chittaphon empezó a sonar y al mismo tiempo mensajes de Jungwoo llegaron al celular de John, el tailandés se levantó para atender al ver que era su madre.

- ¿todo está bien? - su madre preguntó a través del celular.

- así es, estamos en imjado, lamento no haberte avisado nada. - Chittaphon se sintió avergonzado al hablar con su madre.

- tranquilo, mi niño. ­¿Quieres hablar con los pequeños? - La mujer preguntó caminando hacia los niños que estaban cenando y viendo la televisión.