Epilogo

2.3K 284 45
                                    

El tiempo paso y el matrimonio Thitiwat disfruto las mieles de ser padres primerizos, su hijo era un niño tranquilo, y la adoración de Sammy que en cada oportunidad que tenía, se lo llevaba consigo y les daba un tiempo a solas a Ohm y a Fluke; Kao y Earth habían dado el gran paso y poco después del nacimiento de Dean fueron invitados a la boda de sus amigos, la cual fue una ceremonia sencilla solo con sus amigos más cercanos como invitados, su hija estaba hermosa y cada día se parecía más a su padre omega, cosa que tenía muy contento a Kao, porque tendría una mini versión de su esposo.

Hay que decir que Ohm después del susto que paso en la sala de partos con su esposo, se volvió más sobreprotector con él, siempre que iba a la empresa o tenía que salir a hacer algún trabajo para el consejo de clanes, se aseguraba que hubiera alguien haciéndole compañía, aunque el doctor le había a dicho en las consultas que el castaño estaba bien y su enfermedad estaba controlada.

La pareja se encontraba junto su pequeño Dean, en su lugar secreto en el bosque esperando el atardecer como todos los días, esa era un rutina que no habían dejado de hacer, y que ahora la disfrutaban junto a su pequeño que al igual que ellos adoraba sentarse entre las piernas de sus padres y observar el espectáculo de colores que se formaba cada vez que el sol se ocultaba.

-Ohm- lo llamo el omega haciendo que el alfa le prestara su total atención instándolo a hablar, mientras no perdía cuidado de Dean que perseguía una mariposa no muy lejos de ellos.

-¿Qué piensas de tener otro bebé?- pregunto con una pequeña voz el castaño.

E inmediatamente a la cabeza del alfa volvieron los momentos agonizantes que había vivido, en el nacimiento de su hijo que ya contaba con dos años; y es que en todo ese tiempo se había asegurado de cuidarse para no dejarlo nuevamente embarazado, no quería que nada le pasara a su esposo bajo ninguna circunstancia.

-Fluke, la verdad es que no lo he pensado, no sé si quiera otro bebe, ¿Por qué lo preguntas?- respondió el alfa sinceramente.

-Es que yo quería otro bebé... pero no importa- dijo con voz triste el castaño, haciendo que el hombre se sintiera mal y lo tomara en brazos para tratar de consolarlo.

-Amor... no es que no quiera tener más bebes, es que tengo miedo de perderte, no quiero volver a pasar por todo lo que vivimos cuando tuvimos a Dean- a lo que Fluke solo asintió y se dejó envolver en el olor de su alfa mientras le decía un Te amo.

-¡Papi!, ¡Papi!, mila- llego corriendo el pequeño mientras se sentaba en las piernas de Fluke y señalaba hacia el cielo.

-Si mi amor, ya es hora del atardecer- le respondió besando su mejilla el castaño, y lo acomodaba mejor en su regazo.

Dean con tan solo dos años, era muy inteligente, era el orgullo y perdición de sus padres, le encantaba pasar el día pegado a Fluke mientras este pintaba, jugar en el jardín o simplemente acurrucarse con sus padres en la sala y ver televisión, se quedaron viendo el atardecer hasta que el ultimo rayo de sol se escondió, y el niño se durmió.

En esos dos años el omega se había dedicado enteramente al cuidado de su hijo y de la casa, no había querido estudiar cómo se lo había sugerido su esposo, o al menos no de momento, quería disfrutar de su bebé lo máximo posible, ya tendría tiempo después para hacer otras cosas, por ahora el pintar era su pasatiempo y el alfa sabiendo de su afición había acondicionado una habitación de la casa solo para él.

Cuando llegaron a la casa, Ohm tomo al niño en brazos y subió directo a su habitación siendo seguido del castaño, quien todo el camino había estado callado más de lo normal; acostaron al niño, le pusieron su pijama y se fueron a su cuarto, una vez allí, el alfa no soporto más el silencio y le pregunto:

-Amor, ¿Qué pasa?- él se sentó en la cama y lo miro con ojos llorosos.

Él se arrodillo hasta quedar en frente del omega –Es que...- comenzó a hablar el castaño –Te vas a molestar conmigo.

Ohm tomo su rostro que estaba cabizbajo e hizo que lo mirara a los ojos instándolo a terminar su declaración –Es que estoy... embarazado y tú no quieres otro bebé- rompió en llanto Fluke.

El pelinegro quedo en completo silencio, solo podía repetir en su cabeza la palabra embarazado, una y otra vez, cerró los ojos y sus miedos se apoderaron de él pensando que con otro parto podría perderlo, pero no le echaba la culpa de nada, sabía muy bien que él era el responsable, él era el que se había encargado de usar el método anticonceptivo, necesitaba pensar, necesitaba serenarse, por lo que beso su frente y salió de la habitación.

Ya en su oficina Ohm se sentó en el mueble que allí tenia, y comenzó a recriminarse a el mismo por ser descuidado, y lo peor era que su esposo pensaba que no quería un nuevo bebé, cuando la verdad la noticia no le desagrado, solo que estaba en pánico por si le pasaba algo grave a su esposo, se quedó cavilando por un rato, hasta que se dio cuenta que lo había dejado solo en la habitación hecho un mar de lágrimas.

Corrió nuevamente escaleras arriba, pero cuando llego a su cuarto no lo vio por ningún lado, se reprochó el dejarlo solo, entonces se le ocurrió en donde podría estar y efectivamente lo encontró en el cuarto de Dean acurrucado en la pequeña cama con el niño; al acercarse, vio las marcas de lágrimas que surcaban sus mejillas, haciendo que se sintiera como todo un imbécil, por lo que sin despertar a su hijo tomo a su esposo en brazos y lo llevo a su habitación en donde lo dejo en la cama y se abrazó a él, para que sintiera su presencia.

Lo cual Fluke no tardó mucho en notar y dijo de repente –Lo siento.

-No tienes nada porque disculparte, yo no estoy molesto, en dado caso el que debería pedir perdón soy yo, yo no me cuide, y cuando recibo la noticia voy y te dejo solo, perdóname- se disculpó el alfa arrepentido por su accionar.

El castaño simplemente lo beso y lo abrazo para luego decirle cuanto lo amaba, Ohm profundizo el beso, no quería separarse del omega, quería hacerlo sentir querido, y entre besos se desprendieron de sus pijamas para hacer el amor dulcemente, demostrándose cuanto se amaban.

Ya recuperados y a punto de dormirse el alfa pregunto: -¿De cuánto tiempo estas embarazado?

-Dos meses y medio- contesto con una sonrisa Fluke, y efectivamente el tiempo coincidía con su ultimo celo pero no podía recordar en que momento lo hicieron sin protección.

Dos años más tarde una hermosa niña llamada Lawan, jugaba junto a su hermano Dean quien la cuidaba fervientemente. Era el cumpleaños número 4 de Dean y estaban los hijos de Kao y Earth y para sorpresas de muchos el hijo Prem y Boun, aunque ellos no estuvieran juntos; había otros niños, los cuales eran hijos de su personal el cual se había ampliado.

La fiesta fue todo un éxito, los niños se divirtieron y sus padres convivieron tranquilamente, en eso pensaba Ohm mientras veía a lo lejos a su omega conversar con sus amigos; la amistad que se había formado entre Fluke, Prem y Earth era muy fuerte, se ayudaban entre ellos, y solían juntarse en el parque para ver a sus niños jugar.

Una vez que despidieron a los invitados, era tiempo de descansar –Papá – Ohm escucho el llamado de su hija.

Solo quería que la cargara, su pequeña era muy apegada a él, le encantaba estar siempre entre sus brazos, ayudo a Fluke a colocarle la pijama y mientras lo hacía pudo escuchar a su esposo preguntándole a su hijo.

-¿Te gusto la fiesta amor?

-Si papi, me encanto jugar con mis amigos.

Ambos padres solo pudieron sonreír, luego de cambiar a los niños se fueron a descansar, Ohm abrazo a Fluke a su pecho y se sintió agradecido por la oportunidad que le había dado la vida, tener una familia a la cual cuidar, su razón de vivir, todos los días daba gracias por habérselo encontrado aquella tarde en el parque para ver el atardecer y que la anciana Anthika lo hubiese escogido a él para ser su esposo.

Lo único que podía pedir era envejecer juntos y poder ver a sus nietos jugar mientras apreciaban un nuevo atardecer.

Fin

Y con esto llegamos al final de la historia espero que les haya gustado. Quiero darle las gracias a todos nuevamente por tomarse el tiempo para leerla y dejar su comentario y votos.

ATARDECERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora