Capítulo 31

315 49 6
                                    

Junio de 1939

URSS y Sendero habían arreglado las cosas, el soviético ignoro los mensajes por 3 meses ya que confiaba en su pareja.

—URSS eres mi socio, pero debes pagar la deuda que dejo tu padre, no esperare más tiempo.

—Ya lo se China solo dame algo de tiempo, te daré algo que valga la pena por ahora sigue ocultando que yo te debo si eso sale a la luz seria una mala imagen.

Una vez terminada la llamada se levantó de su silla para poder ir a su casa, había estado quedándose en otra que era muy cerca a su parlamento para terminar más rápido su trabajo.

Salió del hotel y compró un bello ramo de rosas junto con los chocolates que tanto le encantaba a su pareja, también aprovecho en decirle a sus hijos que se fueran de la casa.

—¿Qué es esto? —levantó el sobre qué estaba en la entrada de la puerta y lo abrió.

Dentro de ese sobre ellas había fotos de su pareja besándose con Nazi, con molestia arrugó el sobre y se fue del lugar tirando las rosas junto con los chocolates en medio del camino.

URSS no regresó a casa, Sendero lo llamó muchas veces, pero el contrario no respondía, sus hijos tampoco volvieron a casa.

Sendero no entendía nada, él simplemente lloro toda esa semana sintiéndose abandonado ya que hasta Nazi dejó de venir, poco a poco sentía que su mundo se oscurecía.

—P-por favor URSS te necesito, vuelve —escondió su cabeza entre sus piernas mientras esperaba en la puerta a su amado.

En todo este tiempo no comió ni durmió para nada, ya que tuvo problemas para conciliar el sueño y cuando intentaba cocinar el cansancio en su cuerpo lo invadía.

Noto que su pierna empezaba a temblar con más ocurrencia y que sentía que se encontraba en constante peligro, su ritmo cardíaco empezó a aumentar junto con su respiración.

no había duda, llegó a desarrollar un trastorno de ansiedad.





—Que Mierda haces aquí es mejor que te largues —el contrario entro de todos modos a pesar de su advertencia.

—No respondías mis llamadas así que vine a verte.

—Es mejor que te vayas o de lo contrario no me voy a contener y te asesinare sin importar nuestro tratado.

sentía muchas ganas de golpearlo por haberlo engañado con su pareja, pero no podía ya que habían firmado un acuerdo en no lastimar al otro.

—Solo vine por que quiero que sepas la verdad.

de su bolsillo sacó una grabadora poniéndole play.

En la grabación se podía escuchar la insistencia de Sendero al ser rechazado por Nazi, este decía que su pareja lo trataba feo que ya no lo amaba y que se había enamorado de él, mientras que el contrario decía que no podía hacer eso ya que eran amigos y no sentía nada por él.

—Te lo dije cariño, el amor es un asco —envolvió con sus brazos el cuello del soviético acercando su rostro, aprovecho que este se encontraba desconcertado —por que mejor no volvemos a como éramos antes.

Su antigua relación se basada en el sexo cada vez que el contrario quería, sin embargo todo eso quedó de lado cuando URSS conoció a Sendero, un día cuando Nazi lo busco este le dijo que ya no quería tener sexo con él y simplemente se fue.

Se enojo tanto por dejarlo de lado aun a pesar que desde hace tiempo se le había confesado, llegó a pensar que teniendo sexo podía tener la oportunidad de enamorarlo, no obstante todo fue una ilusión.

Aliados [Editando] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora