Roue De Couleur

22.

Maldición.—

El chico indefenso habla con molestia e irritación. La piel de sus muñecas está tomando un tono rojizo por todo el forcejeo que el desempeña. Sus pequeñas manos están atadas firmemente a la cabecera de la cama en donde esta acostado.

Puede decir que se ha lastimado ya unas cuantas veces, pero ahora poco le importa eso. Su garganta le duele de tanto gritar, pero eso le importa una jodida mierda.

Su mayor anhelo en estos momentos es librarse de su situación porque él no cree que nada bueno pueda venir a co ntinuación.

Suspira dejando de moverse para soltar un bufido resignado.

Liu YangYang es pacifista, hasta cierto punto, no le gusta la violencia. Cuando es necesaria, él trata de evitarla lo más que puede, porque para esa clase de asuntos está Kun.

Kun...¿qué estará haciendo ahora? ¿estará buscándolo? ¿está a punto de encontrarlo? O quizá ¿no está haciendo ningún esfuerzo?

Como sea, él ha vivido una vida tranquila realmente a lo que se puede decir. Claro, ha crecido como un chico inteligente, independiente y seguro de sí mismo, pero siente que todas esas cualidades ya no importan ahora.

A YangYang le enferma el solo hecho de que haya podido ser tan tonto para ser un blanco fácil. ¿Independiente? Eso parece no estar en su currículum ya que lo único que puede hacer, es esperar a que alguien venga por él.

Y que lo encuentre a tiempo.

No lo va a negar, puesto que sería tonto si lo hiciera, él tiene miedo. No quiere dejar este mundo aun, tiene muchos planes para su futuro, pero a muy a su pesar, todos tienen esta clase de planes.

Incluso Yuta y JungWoo los tenían.

Pero al diablo los demás. Él mismo debe
ser su prioridad número uno, ¿qué gana con preocuparse por los demás? Nada.

Su familia, sus amigos y hasta...Kun podrán ser personas importantes en su existencia, pero él siempre ira primero por sobre todos.

Y hablando de éste último, pues, ¿qué
puede decir? Eran personalidades distintas pero aun así, lograron congeniar. Ellos pasaron de ser agua y aceite a ser inseparables.

Aun así, YangYang tenía miedo, y él odiaba eso. ¿Por qué le iba a tener miedo a ser algo de Kun? ¿Dónde estaba esa confianza que tanto proclamaba tener?

Kun había intentado de todo para ganarse el corazón del menor, pero éste le rechazaba por simple miedo a no ser lo que él espera. YangYang tiene el defecto de que no sabe cómo hacer feliz a las demás personas.

Y tan simple como eso, él tenía miedo de que Kun solo saliera lastimado de una relación en donde el menor no es capaz de regresarle los sacrificios y detalles que él tanto espera.

Pero ahora, estando en una situación así, él decide luchar. No solo por su vida, sino también por su relación con Kun.

YangYang usa toda su fuerza de voluntad para hacer que ese espíritu batallante regrese a él para poder librarse de su situación.

____

¿Aun sin señales de YangYang? —Pregunta TaeYong con tono escéptico. Sus ojos están clavados en el libro delante de él. Toma la taza con espresso que se encuentra gentilmente colocada en la mesa para beber un poco del humeante líquido en su interior.

Ante toda la situación, el chico que acaba de entrar al lugar ya ha decidido portar una actitud cortante y poco amistosa, ya que el término 'amistad' ya no forma parte de su vocabulario.