Sonrisa Enfermiza (JEFF X SLENDERMAN) (OMEGAVERSE)

.21.

El almuerzo pasó rápido, al igual que el breve comunicado y orden que Slenderman dio. Los proxies con ayuda de Ben y ambos Jacks, fueron los encargados de ir a preparar el bloqueo de entrada. Los otros creepypastas se quedaron en sus habitaciones como día libre.

Ya entrada la noche, Jeff salía de su ducha luego de haber pasado parte de la tarde practicando movimientos nuevos que aprendió recordando el entrenamiento que tuvo con Eyeless y de algunos vídeos de YouTube. En todo el tiempo no fue llamado ni interrumpido por nadie, lo que agradeció de corazón.

Sin embargo, a pesar de haber tenido un buen día tranquilo, sabía que pronto tendría que salir de aquí. No sólo por el hecho de que puede ser descubierto, sino también porque su etapa, 'eso' se estaba acercando.

Ya que estaba limpio y cambiado a un nuevo conjunto refrescante de ropa, decidió aprovechar el tiempo y alistó una mochila con diversos conjuntos de ropa, dinero, supresores y demás, lo suficiente para estar fuera por una semana o un poco más.

Había escuchado de Grinny que los Guardianes ahora rondarían solo una parte del bosque por seguridad y cuidarían específicamente las entradas secundarias ya que la principal estaría bloqueada de manera física y química.

Esas entradas secundarias sería su boleto de salida. Sería muy arriesgado, por supuesto. Primero tendría que informarse sobre los Guardianes; sus fortalezas y movimientos sería lo principal a saber. Segundo era la ruta a tomar para poder escapar. Y tercero sería que tan bien podría controlar su ilusión para poder pasar desapercibido por la ciudad que los rodeaba.

Tomaría tiempo adecuarse, ganar experiencia de calle y sobrevivir sin ser capturado por la policía mientras seguía con sus pequeñas diversiones nocturnas que incluían su cuchillo y mucha sangre. Eso sin contar los días dolorosos que tendría cuando entre en celo y los supresores básicos que tenía dejaran de hacer efecto.

Esta noche utilizaría la amabilidad de Grinny y lo llamaría con un buen pedazo de carne cruda y todavía sangrienta. Con preguntas disfrazadas de curiosidad sacaría la información necesaria para su plan de escape.

Ahora entonces, ¿qué podría hacer en este tiempo de espera? ¿debería seguir la corriente y preguntar al poste en terno más detalles sobre lo que harán luego de que esos policías hayan decidido retirarse al no encontrar nada?

Pensando en policías, era extraño que aún no hayan hecho declaraciones sobre él... ¿No son demasiado estúpidos... cierto? Era fácil conectar los puntos de las tiendas robadas y él, después de todo sucedieron muy cerca.

Su cabeza se sacudió un poco ante un pensamiento fugaz, su sonrisa se extendió al imaginarnos como monos y gorilas vistiendo el uniforme. El mero hecho de que no estaba tan lejano a la realidad solo aumentó la gracia.

De pronto, algo lo detuvo. Era aquella sensación de ser observado desde alguna parte remota de su habitación. Trató de ignorarlo pero era difícil, esa cosa seguía cada maldito movimiento leve que hizo. Harto de no saber su identidad y de ser acosado, tomó asiento de golpe desde su cama y miró su alrededor molesto.

—¿Quieres putas dejar de mirarme?

El ambiente se tensó, casi como queriendo dar a entender que el ser se había sorprendido por la deducción de su presencia. Jeff continuó mirando a donde creía estaba pues la energía era más fuerte ahí.

—Si tienes algo que decirme haz acto de presencia y dímelo a los ojos, maldito acosador. Es muy incómodo sentir que te observan desde un punto ciego, ¿sabías eso?

La presencia se alejó, y pronto ya no estuvo en la habitación. Jeff bufó molesto, pensó que con esas palabras provocativas al menos escucharía una queja o una palabras molestas del ser; de tal manera cuando escuche a los otros miembros de la casa podría identificarlo y hacer frente.