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Capítulo 45 | Rebecca

‹‹Rebecca››

Dos meses después

—¿Entonces que dices? —pregunta Andrew.

—Yo…

Andrew tiene en su mano un cajita, con un anillo. Y está esperando por mi respuesta.

—¿Quieres ser mi esposa, Rebecca? —repite y agrega—: ¿Formar una familia conmigo? ¿Ser la madre de mis hijos?

—¿No crees que son muchas preguntas?

—Es que debo convencerte. No me estás contestando.

Se me escapa una risa nerviosa.

—Sí, Andrew. Sí. Sí —le contesto, a la vez que asiento frenéticamente.

Me coloca el anillo en el dedo anular. Y se levanta de la silla, se acerca a mi, me jala un poco de la mano, haciéndome levantar y atraerme hacia él, para luego, comenzar a besarme, en un beso apasionado ¡Vaya día de cumpleaños! Nunca había tenido uno así.

En la mañana Andrew me regalo un dije con el inicial de su nombre, y él se quedo con uno que lleva mi inicial. Y más tarde me regaló un vestido elegante de color azul como el cielo. Y me dijo que me tenía un sorpresa.

Y sí, me llevé una enorme sorpresa al llegar aquí…

Andrew rentó una habitación de un restaurante de hotel. Cerca del balcón dando la vista a la hermosa cuidad. Observo el anillo.

—¿Te gustó? —pregunta. Y me frota suavemente las mejillas con ambos pulgares.

—Es hermosa —le rodeo el cuello, tiro de su pelo corto y comienzo a besarlo nuevamente.

Después de unos segundos. Nuestras frentes se quedan unidas, mientras una sonrisa tonta nos asalta.

—¿Y si nos casamos mañana? —dice Andrew de pronto.

—¿Qué? ¿No estarás hablando en serio?

—Estoy hablando muy en serio.

—¡Andrew!

El ríe.

—Okay… tranquila. Lo planearemos juntos. ¿Vale? —me da un beso corto—. Y escogerás un vestido blanco. Te verás hermosa, como siempre. Y serás mi esposa.

—Y tú serás mi esposo.

—Y serás la madre de mis hijos.

—Y tu el padre de mis hijos.

—Claro —ríe—. Vámonos a casa ya.

Entiendo lo que realmente quiere decir con eso. Y me muerdo ligeramente el labio por unos segundos.

—Está bien.

**

—¡¿No?! —grita eufórica Jhulie.

—¿En serio? —pregunta mamá.

Las dos están de visita al departamento.

—Sí.

—¿Cuándo va a ser? —pregunta mi amiga.

—Aun no tenemos la fecha. Ya lo escogeremos.

—Hola —Andrew aparece en la sala. Y saluda a mamá y a Jhulie.

—¡Felicidades a los dos! —grita Jhulie, mirándonos a ambos.

—¡Gracias! —le sonríe—. Señora Luisa... —observa a mi mamá y se acerca a mi sentándose a mi lado—. ¿No nos va felicitar?