Me Quedo Contigo (F4 y Tu)

•Capítulo 7: Problemas•

Narrador omnisciente

Mientras que ustedes dos hablaban, los F4 se preparaban para ir a tu casa-mansión.

El único que sabía de tu ubicación era Woo Bin, ya que debido a sus contactos, pudo saber tu número de teléfono y hasta en dónde vivías. Así que los otros amigos debían esperarlo a él para ir juntos.

Antes que nada, Woo Bin tenía que recoger a Jun Pyo, para así darle una explicación convincente a la mamá de su amigo y así ella lo dejara ir de pijamada.

—Bien, hasta mañana mamá. —le dijo Jun Pyo sin verla a la cara

—Buenas noches, señora Kang. —se despidió Woo Bin

Los dos por fin salieron del hogar de Jun Pyo y se reunieron con los demás chicos para ir todos juntos.

Woo Bin era el que delante de todos, en su auto de color amarillo, despues le seguía Jun Pyo con su auto de color negro, Yi Jeong con su auto de color rojo y Ji Hoo con su auto de color favorito, el blanco.

—Oye, Woo Bin... —le habló Jun Pyo— ¿Por qué rayos hablamos todos en una videollamada cuando estamos conduciendo?

—Pues ñorque quiero que tú mismo les muestres a los chicos tu saco.

—¿Qué? ¿P-para qué? Ahora no lo tengo, me lo saqué y esta en la parte trasera del auto. —dijo con un notable nerviosismo

—Te haz puesto nervioso, brother. No nos engañas. —le dijo Woo Bin

—En tus piernas se puede observar una tela más, ¿no es el saco? —añadió Ji Hoo, pues era una videollamada grupal

—No entiendo nada. —dijo Yi Jeong— ¿Qué pasa con ese saco?

—Jun Pyo, brother... ¿Se lo cuentas tú o yo?

—No sé de qué hablas. —respondió él rápidamente— Y no me desconcentren ahora, estoy conduciendo y no quiero estrellarme.

—Bueno, entonces lo haré yo. —dijo Woo Bin

—¿Saben? Creo que hay un policía patrullando, nos pueden multar... —dijo Jun Pyo

—Pues yo diría que tú no le tienes miedo a eso en realidad. —le dijo Ji Hoo, sonriendo divertido— Mas bien, tú lo multarías a él.

Todos sonrieron al imaginarse la escena de Jun Pyo gritándole al policía.

—Ya cállense. —les ordenó, a lo que éstos lo hicieron— Me voy a desconectar, ya no tengo batería.

Antes de que los demás pudieran objetar, Jun Pyo se salió de la videollamada.

—Seguro se avergonzó... —murmuró Woo Bin— Bueno, igual voy a contar lo que pasó.

Flash back.

Jun Pyo y Woo Bin habían terminado de darle varias explicaciones a la señora Kang, pero ambos habían salido de la mansión con la condición de que Woo Bin debía de invitar a sus padres a la casa de Jun Pyo, para que así ambas familias se conozcan y así, en un futuro, hacer negocios.

—Oye, Woo Bin. —le habló Jun Pyo— ¿Podrías traer mi auto tambien?

—¿Por qué tú no lo traes?

—Ah, es que me da flojera. —respondió en tono pesado— La bruja me hizo poner de mal humor.

Woo Bin suspiró irritado.

—Bueno, bueno, pero me demoraré más de la cuenta.

—Ya.

Woo Bin se fue a sacar su propio auto y el de Jun Pyo del estacionamiento.