Jungkook era el hombrecito más amable y considerado que existe en el planeta tierra, su madre es su adoración y haría todo para ayudarla a cumplir sus sueños.
Su concepto del amor es muy limitado a la familia, nunca ha pensado en enamorarse de una c...
—Mi Jungkookie es tan irresistible que hasta los hombres se te lanzan encima.
Esa fue la conclusión de noona apenas les comenté lo sucedido, hyung se rió y de hecho continuaba riéndose.
—Vaya, estás que ardes entonces.— le miré mal, solo así fue cesando su risa poco a poco— Al menos besaste a tu chica.
—Si, como por un minuto.
—Ambicioso, en fin.— sacudió la mano— ¿Cómo te has sentido estos días? Yo te veo muy animado.
—Lo estoy, llevo diciéndote todos los días que puedo volver a trabajar.
Suspira, colocándose la camisa que su novia le lanza, ambos están más que organizados por lo que supongo se debe a que van a salir.
—Hagamos esto— empieza— mañana vuelves al ruedo, pero solo aquí, si vas a pasarte por el restaurante que sea solo para saludar a tus padres y a tu aspirante a novia.
—La cuál debo conocer.
—Traela a comer, a primera vista lucía agradable pero no puedo decir mucho más— le preguntaré si desea hacer eso— debemos darle el visto bueno, sería tú primera novia.
Arrugo el puente de mi nariz, claramente inconforme.
—Eso tendrían que hacerlo mis padres.
—Ellos ya tendrán su tiempo— me señala— quiero conocerla, sentarnos y hablar para saber que tan buen prospecto es, quiero creer que si te tiene así de loco es por algo.
Tal vez quiera invitarla a Busan, niego, estoy apurandome demasiado, la asustaré.
—Ya veremos— es mi respuesta— ¿A dónde van ustedes dos?
—A fortalecer nuestra relación.
—Tendremos una cita— explica mejor Harie, golpeandole el brazo— hace mucho tiempo no salimos los dos solos, así que aprovechando que no hay compromisos programados para hoy, saldremos a comer.
Asiento, viéndola perderse de nuevo en la habitación, giro el rostro observando con fijeza sospechosa a Yoongi, este se ríe.
—¿Qué?
—¿Cómo qué?—acerco mi silla a la suya, sigue haciéndose el tonto— No soy estúpido, dijiste que sería cuando volvieran a salir y no sé a dónde exactamente.
—Iremos a cenar.
—¿A dónde?
—A un restaurante.
—¿Uno bonito?
Suspira.
—Uno elegante, pero no hagas mucho escándalo que ella no sabe.— quiero chillar como adolescente ante la emoción— Nadie lo sabe, sólo tú.
—¿Ni siquiera Jin hyung?
—Ni siquiera él, está muy ocupado con Kaet embarazada hasta las orejas.— se encoge de hombros— Pero lo prefiero de esa manera, entre menos sepan, mejor.
—¿Por qué?
—En caso de que diga que no, ya sabes como es Harie.
Blanqueo los ojos, como si fuese posible.
^o^
—Si vienes a trabajar, largo— mamá señala la puerta con su cucharón— si vienes a que te prepare algo rico, bienvenido.
—En realidad vine a saludar— me excuso rápidamente— y porque es la hora de descanso de Reya ¿no?
—No puede ser— coloca ambas manos sobre su cintura, escucho la risa del personal de cocina— Ya tus prioridades han cambiado, ahora vienes a ver a tú novia. Fui yo quién te trajo al mundo, Jungkook, no te olvides de eso.
—No es como que pueda...
—Vete, antes de que veas a mamá enojada.
—Aún así quiero comer algo rico.
Beso su cabeza y me voy a paso rápido, evitando ser alcanzado por sus utensilios, papá está ocupado y aún así sacude una de sus manos en mi dirección, le devuelvo el saludo y en medio de mi travesía hasta el cuarto de descanso, Sunhoo, el mesero nuevo que se contrató, se interpone en mi camino.
—Buenas tardes, jefe.
—Hola, Sunhoo. No soy tu jefe.
—Jefe, una pregunta rápida— Cristo, bien, me cruzo de brazos y le observo atento— ¿De casualidad está usted saliendo amorosamente con Reya-chan?
¿De dónde carajos salió el chan?
—¿Por qué la pregunta?
—Porque es importante para mí saberlo y de esa manera sabré cuál será mi siguiente movimiento.
—Bien, si, estamos saliendo. Ahora sí me disculpas-
—Ah.
Arrugo el ceño.
—¿Ah?
—Si, ah. Nos vemos, jefe.
¿Qué?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.