Jungkook era el hombrecito más amable y considerado que existe en el planeta tierra, su madre es su adoración y haría todo para ayudarla a cumplir sus sueños.
Su concepto del amor es muy limitado a la familia, nunca ha pensado en enamorarse de una c...
Siempre creí que la manera de consolar que tenía Yoongi era bastante mala y cruda, como ahora que intenta que Harie deje de llorar con la película, Reya está llorando, pero en silencio y aferrada a mi.
—Ya, ya. Nada de eso es cierto, el perro no se murió en la vida real.
—Pero se murió en la historia, Yoongi, eso es lo que duele.
—Te dije que viéramos algo más feliz.
—¡¿Qué iba a saber yo que el perro se moría?!— exclama, ahora vemos los créditos, ha terminado— En la portada se veía muy feliz.
Los ignoro a ellos y a su discusión sin sentido, Reya se sienta derecha y me observa con ojos de cachorro deprimido.
—Estoy muy triste.— dice— Ahora quiero adoptar un perro para darle todo el amor que ese perrito no recibió.
—Si recibió mucho amor.
—Pero se murió y no pudo recibir más.— y solloza, su frente golpea contra mi pecho y observo a noona con ojos acusadores, pero ella está muy ocupada con su propio llanto— No entiendo como puedes no llorar con eso.
La verdad si me he puesto triste, pero no al punto de querer llorar desconsoladamente.
Bueno, tengo que llevar a la señorita lágrimas a su casa antes de que Harie vuelva a querer acapararla para ella y se haga mucho más tarde.
—Como sea— nos levantamos todos al mismo tiempo— espero verte de nuevo, cuídate mucho y tienes mi número para cualquier cosa que te apetezca.
—Fue un gusto conocerte, Reya. Nos vemos pronto.
—El gusto fue mío, la pasé muy bien— es que es preciosa, la amabilidad hecha humana—estaremos hablando.
^o^
—Quéeeeeeeeeedate.
Alarga la "e" en un intento por sonar más convincente, yo realmente quiero quedarme pero siento que estoy atosigándola, todo el tiempo estoy aquí, bueno, desde la primera vez que entré, casi parece que vivo con ella.
—No lo sé...
—Quédate, te lo estoy suplicando, no quiero que te vayas aún, estemos un ratito más juntos— se empina, me regala varios besitos mientras intenta que le dé el gusto de quedarme— Rey no está, debía organizar algunos asuntos de la universidad, su inscripción y esas cosas.
Me está embarrando labial en toda la boca, la estoy sintiendo pegajosa y lo más chistoso es que se le ha corrido, entonces también es un desastre.
Termino cediendo, ya qué.
—Pero sólo un rato.
—Igual tenías que entrar para limpiarte, tienes labial, ups.
—Muy graciosa.
La suelto para terminar de entrar, dice que me coloque unas pantuflas nuevas que compró para mi y se me derrite el corazón, al mismo tiempo pienso en que de verdad paso mucho tiempo aquí si me ha comprado aquello.
—Prepararé un poco de chocolate caliente, pero primero iré por toallitas desmaquillantes para este problema— señala mi boca y la suya— espérame en la cocina.
Obedezco y como si fuese una simple decoración más de la casa, me quedo sentado en el banquillo junto a la barra de la cocina, ojeando mi teléfono para encontrar los mismos mensajes de siempre, aquellos tontos regañandome porque no aparezco, mamá recordándome el viaje a Busan, papá haciendo lo mismo pero pidiéndome que le pregunte a Reya si desea ir para pasar tiempo con ella y conocerla.
Mi dolor de cabeza aumentando por eso.
—Muy bien— reaparece, su rostro totalmente limpio me hace sentir contento, no tiene vergüenza de mostrarse sin maquillaje— déjame limpiarte la carita.
Se ubica en el espacio entre mis piernas y comienza su tarea.
—¿Qué te pareció cenar con nosotros?
—Muy divertido, no me habías dicho que tu hyung también era originario de Daegu.
—¿No lo hice?— niega, deja las toallitas a un lado— Creí que lo había hecho, soy despistado, lo siento.
—No importa, fue lindo hablar sobre eso con él, es amable. Ellos te aman muchísimo, Jungkook, se nota en la manera en que te miran y como se expresan de ti— sonríe, abriendo un poco de más los ojos debido a su emoción— cuando Harie unnie me enseñaba las fotografías, también me contaba dónde fueron tomadas, en que momento y así sucesivamente, decía cosas tan lindas. Tú realmente eres su adoración, están muy orgullosos de ti.
—Y aún no has escuchado a mis padres, son el triple de aduladores.
Besa mi nariz.
—Hablé con tú padre ayer. Me pidió que le ayudara en caja, conversamos un poco, es un señor bastante carismático.— así es papá, le encanta conocer personas y ser amable le sale tan natural— Nunca escuché a un padre hablar tan bien de su hijo, decía que estaba muy agradecido con la vida por mandarle a un niño tan bueno y luego tú madre llegó, dijo que sentía que te había criado bien y que amaba mucho la relación que como padres sostenían contigo. Tienes lazos muy fuertes con las personas.
Suspiro, escondiendo mi cabeza en su cuello.
—Basta, terminaré llorando. Hoy me han dicho muchas cosas que me tienen muy sensible.
—Bien, suficiente sentimentalismo por hoy ¿te parece?— hago un sonido de afirmación— dije que prepararía chocolate y es lo que haré.
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