CAPITULO 5

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Descubriendo a un enemigo

Me asomo sobre la cortina que cubre el interior de la celda para encontrar la respuesta de ese comportamiento del chico. No es algo, es alguien. Una chica muy bella de pelo castaño. Ella se encuentra recostada sobre el colchón de abajo con la mirada perdida en la pared algo agrietada. Al darse cuenta de mí, frunce el ceño al no reconocerme y se sienta en la cama tan deprisa que podría decir que le acabo de dar un susto.

-¡Oh, lo siento! Es que...el chico es algo brusco cuando empuja- digo tocando mi hombro viendola -Acabo de llegar.

La celda tiene demasiadas cosas, en la silla hay varias prendas amontonadas más una colcha de color azul rey para el frío en las noches.

-Disculpa a Glenn...estamos pasando por una situación difícil.

Puedo notar que tiene lágrimas secas en sus mejillas y las ojeras debajo de esos ojos verdes. Son lindos, pero ahora no es lo que llama la atención de su bello rostro.

Yahir me estaría regañando por estarme preocupando por su estado. Solo sonrío para resistirme.

-¿Estás bien?-las palabras se me salen de la boca sin permiso y mis pies se mueven adelante entrando al lugar.

Puedo ver que asiente mirándome si interés y lo único que puedo hacer es sonreie con amabilidad. Como si esto dependiera en caerle bien a las personas, pero puede ver que no. Una sonrisa no hará que me quede en este lugar. Pienso en la situación difícil ¿Es la comida? ¿Municiones? ¿Qué puede ser más difícil que los caminantes?

-Me llamo Maggie- aunque su voz es apagada, me relaja un poco saber su nombre. Cambia el tema por algo.

-Soy Jennette, llegué con mis amigos. Rick nos recibió y aceptó pasar la noche aquí.

-¿Están seguros de eso?-puedo notar su preocupación.

Trago saliva para resistirme en decir que no, pero Yahir no quiere quedarse. Solo asiento apretando los labios.

-Tengo que irme a dejar las cosas.

Lo mejor que puedo hacer es dejar esto así, con la idea de que mañana no me volverán a ver y así no me costará dejar este lugar seguro.

Tomo la correa de la mochila y doy un paso atrás para salir por completo de su celda, regreso al pasillo y solo es cuestión de dar tres pasos para llegar a una celda vacía.

Puedo decir que es acogedora con solo tener un colchón. Suelto un largo suspiro mientras la analizo con todo el detalle, aliviada de tener algo así. Es tan pequeña. A lado de la litera hay una mesa de madera y una silla. Coloco mi mochila en la superficie y esta se balancea un poco. Me siento en el colchón de abajo y luego me acuesto provocando que un ligero calambre por toda mi espalda acostumbrándose a lo blandito. Cierro los ojos para dormir un rato, pero recuerdo que Carol nos está esperando en el recibidor para darnos la comida y no puedo rechazarla, sin embargo, mi cuerpo me pide a gritos que permanezca aquí por lo que queda del día. No sería mala idea, no sé cuándo volveré a disfrutar una comodidad así con paredes seguras y solo disfrutando del silencio. Ni los gruñidos de los monstruos puedo escuchar hasta donde estoy porque estoy a metros de ellos y puede que del peligro.

-Jennette- identifico la voz de Carl.

Me sobresalto y me levanto de golpe, pero no mido bien la altura de la litera y me golpeo con la rejilla que sostiene el colchón de arriba provocando que vuelva a acostarme de golpe. Paso mi mano por la frente para sobarme mientras aguanto el dolor severo.

• 𝐒𝐎𝐋𝐎 𝐂𝐎𝐑𝐑𝐄 • || CARL GRIMES || [TWD]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora